Mundial Londres 2017: Gatlin da la sorpresa y 'jubila' a Bolt

Nadie esperaba que Justin Gatlin, a sus 35 años, pudiera conseguir lo que tantos años llevaba anhelando, superar a Usain Bolt en la gran final de un campeonato, en una lucha de tú a tú. En Pekín le separó una centésima cuando partía con mejor marca que el jamaicano y en los Juegos de Río volvió a caer ante el omnipresente campeón, que no sabía lo que era perder desde que en Daegu 2011, quedará fuera de la lucha por el podio debido a una salida nula.

Pero a Gatlin no le es ajeno el triunfo, no en vano conquistó el oro en los Juegos de Atenas 2004 y en los Mundiales de 2005 en Helsinki, cuando Bolt no había explotado en el panorama internacional. La marca en Londres, 9.92, será lo de menos para el estadounidense, que sacó toda la rabia contenida en las últimas temporadas para superar en los metros finales al jamaicano, tercero y Christian Coleman, segundo, que visto lo visto en semifinales, parecía el rival a batir en la lucha por el oro.

La salida condenó a Bolt, que con todo cuesta arriba no pudo encontrar el ritmo que en otras ocasiones le valía para superar a sus rivales, y terminó sucumbiendo ante el peso de la ilógica. Esa que dejó patas arriba la final de los 100 metros en Londres, con un doblete estadounidense que ni ellos mismos habrían soñado en un principio.

"No pude remontar, es lo que ha pasado. Coleman salió muy rápido, pero no me preocupaba él sino yo. Vi que yo no iba", explicó Bolt a los micrófonos de nuestros especialistas en Eurosport, Jonathan Edwards y Greg Rutherford, "mis respetos a Gatlin, es un competidor que hace lo mejor que puede".

A sus casi 31 años, Usain Bolt perdió la última carrera individual de su vida deportiva, ante su mayor contrincante en el ocaso del jamaicano. El tricampeón olímpico llegaba a este campeonato sabiendo, que ya no habría más hectómetros para él en solitario. El testigo le espera ahora en el 4x100 a un atleta, que ha revolucionado el atletismo para siempre, y que deja una huella imborrable para todos los aficionados. Hasta Gatlin le reverenció a modo de homenaje, nada más cruzar la linea de meta.

Este tropiezo no desmerece ni mucho menos la trayectoria del mejor velocista de todos los tiempos, que igualó a Merlene Ottey, como atleta con mayor número de medallas de la historia con 14 preseas, y podría superarla si el cuarteto jamaicano de 4x100 le regala un nuevo triunfo a Usain Bolt. De momento el extraterrestre se volvió algo más humano en el Estadio Olímpico de Londres.