Euroliga, CSKA Moscú-Barcelona Lassa: La lógica de Teodosic (92-76)

Llegaba muy tocado el Barcelona, después de caer en Liga Endesa frente al MoraBanc Andorra, y no tenía un buen escenario para poder resarcirse, ante un conjunto, el CSKA Moscú, que se presentaba a la cita con la Euroliga, después de 16 victorias consecutivas en casa en la competición, y liderando con mano de hierro en Europa.

Los peores presagios se confirmaron en cuanto el balón se puso en juego, y es que los moscovitas no querían dejar lugar a las dudas. Las bajas de Nando De Colo y Aaron Jackson en la dirección de juego, y Teodosic repartiendo sus minutos por unas molestias, no parecieron afectarle a un equipo que de la mano de Higgins, con 16 puntos en la primera parte, pusieron rápidamente tierra de por medio en el marcador, ante un impotente conjunto azulgrana que no encontraba el camino al aro (24-11).

La mejor noticia para Bartzokas fue la vuelta de Navarro, que dio un nuevo aire al Barcelona. Como si fuera el Dr. Jeckyll y Mr. Hyde, la entrada del capitán le insufló vida a un equipo, que paso a paso le fueron recortando la ventaja al todopoderoso equipo ruso, que pareció acomodarse en su juego, con una bajada en sus porcentajes que permitieron que se igualara el luminoso.

Cuando Navarro está enchufado es muy difícil de parar, y junto con Claver, que aportó 10 puntos en los 20 minutos de la primera parte, sumaron en la anotación, que pasó de 11 en el primer periodo a 31 en el segundo, dejando totalmente abierto el choque para la reanudación. Una pena que el intento de mate de Tomic sobre la bocina no entrara, ya que se hubiera hablado de un nuevo partido, ante la incredulidad del CSKA, que encontraron un oponente muy diferente con Navarro en la cancha (44-42).

El partido volvía a comenzar prácticamente como al principio, y es que Koponen primero empataba y luego ponía en ventaja a su equipo por primera vez desde los minutos iniciales. El rostro de los jugadores azulgrana era diferente, y veían posible el echarle mano al actual campeón en su feudo, después de una reacción que llenó de moral a los jugadores de Georgios Bartzokas.

En una fase del encuentro con idas y venidas, el CSKA consiguió volver a distanciarse mínimamente, pero la sensación de superioridad del primer cuarto ya no era tal, y había partido a pesar de los intentos magistrales de Teodosic de que ocurriera todo lo contrario, con una nueva lección de dirección y anotación, siempre poniendo en problemas al Barcelona.

Pero finalmente el base serbio fue demasiado para los intereses del Barcelona en Moscú y con 16 puntos y 11 asistencias, secundado por los 23 de Cory Higgins enterraron a los azulgrana en un magistral último cuarto. El CSKA Moscú seguirá como líder destacado de la Euroliga con 17 partidos seguidos venciendo en casa. Los culés en cambio, se alejan a un partido de la zona de playoff (92-76).