La resurrección y el milagro de un héroe llamado Kyle Kuric

La historia del estadounidense Kyle Kuric, de 27 años y 1.93 de altura, es la historia de una maravillosa resurrección. El escolta del Herbalife Gran Canaria fue operado hace menos de un año, el pasado mes de noviembre, de un gravísimo tumor cerebral. La intervención tuvo lugar en el Centro Médico Teknon de Barcelona y se temió seriamente por su vida.

El meningioma le fue detectado pocos días antes de una extraña ausencia. Kuric se perdió un partido de temporada ACB a causa de repentinas y fuertes migrañas. El jugador mantuvo en vilo al baloncesto español hasta que supimos que, si bien el meningioma resultó ser benigno, la operación se había complicado y era preciso intervenir de nuevo. Tras otra operación en el cerebro a causa de un edema, extirpar el tumor y sufrir una última intervención para reconstruir la bóveda craneal, Kuric estuvo varios meses de baja esperando que al menos su vida pudiera volver a la normalidad. Eso sin contar con que su carrera deportiva seguía en el alero.

El pasado mes de marzo el equipo canario sorprendió al baloncesto español al difundir un vídeo titulado 'He is back' en el que se veía a Kuric entrenando a ritmo normal. Con cautela, daba la impresión de que el jugador y su familia habían podido dejar atrás el calvario sufrido.

Así hasta vivir un fin de semana de ensueño, la prueba de una resurrección ejemplar sobre el mismo escenario del que se ausentó aquella jornada maldita, el Buesa Arena de Vitoria.

La Supercopa Endesa 2016 lleva el nombre de Kyle Kuric con letras de oro. En la semifinal del viernes, en la que los canarios superaron al Baskonia, Kuric anotó 24 puntos, y en la final ante el Barcelona sumó otros diez, por los que el escolta acabó el fin de semana con un promedio de 17 puntos siendo elegido por una rotunda unanimidad como el mejor jugador del torneo.

La reacción de su equipo, de su entorno y de todo el baloncesto español ha sido la esperada para un caso tan admirable como el suyo. De entre las decenas de jugadores que vertebran la Liga ACB hay que contar este año con todo un héroe, Kyle Kuric.