Carta abierta de Óscar Pereiro sobre la seguridad de La Vuelta 2015

Estoy viviendo con mucha pena todos los sucesos, caídas, atropellos y toda esta polémica generada por el tema de la seguridad, o falta de la misma, en La Vuelta 2015. Nadie, ni un solo empleado de todos los que trabajan en esta carrera tiene ni la mala intención ni el propósito de querer hacerle daño a un ciclista. Toda la vida, a lo largo de toda la historia del ciclismo, han sucedido episodios como estos y, sin querer buscar ningún culpable, a veces son responsabilidad del ciclista.

Por ejemplo, viendo las imágenes del golpe de Sergio Paulinho contra una moto, ves cómo podría haberse evitado. Quiero dejar muy claro que el ciclista siempre tiene preferencia y también tiene que haber una convivencia mutua en la que prime la seguridad, pero que también sea buena para el espectáculo. En los últimos años se ha incrementado notablemente el número de motos, coches y vehículos en carrera. Los tiempos cambian y también hay diferentes compromisos con marcas y patrocinadores, por esta razón, la única forma de evitar que vuelvan a suceder este tipo de cosas es llegar a un punto de encuentro. Entre equipos, organizadores, las asociaciones de ciclistas existentes y la propia Unión Ciclista Internacional.

Hay un debate abierto en todo el mundo, por esta razón si realmente se quiere llegar a ese acuerdo unánime lo que menos se tiene que hacer es todo lo que estamos viviendo ahora mismo. He llegado a oír y leer que si ASO [Amaury Sports Organization, empresa propietaria de la organización de La Vuelta] tiene algo contra el equipo Tinkoff-Saxo. Si eso llegara a ser cierto, sería un tema penal, algo gravísimo. No es ninguna broma. Hoy en día cualquiera puede opinar o hacer ruido en las redes sociales, de ahí a que se escuchen y se lean auténticas barbaridades. No hace falta haber sido profesional de esto ni ser un gran entendido. Por esta razón no podemos limitarnos a decir ni opinar que La Vuelta lo hace todo mal.

Parece que por ser La Vuelta y por ser españoles tenemos que ser más críticos que nadie, o más críticos que con cualquier otra carrera. En el Tour de Francia y en más carreras también ha pasado. Los ciclistas también se van al suelo en las etapas de adoquín o en el Paso de Gois, por citar solo algunos ejemplos. Por esto tenemos que hacer el esfuerzo de cuidarlo todo un poco más. Y que nadie se olvide de que a lo largo de la historia del ciclismo hay motoristas que han sufrido accidentes, y que incluso han muerto por ayudarnos a nosotros, los ciclistas.

En la salida de La Vuelta 2015 teníamos la mejor participación de los últimos años, al nivel del Tour de Francia. Desgraciadamente ya no están Froome, Van Garderen, Nibali, Sagan, Cancellara… y parece que Nairo Quintana lo está pasando mal y podría no acabar. Pero centrar todo en este debate y en este ruido generado de las caídas, atropellos o la polémica por la expulsión de Vincenzo Nibali está haciendo que durante la primera semana no hayamos podido disfrutar de la irrupción de jóvenes estrellas como Esteban Chaves o de las prestaciones de Tom Dumoulin, quien si no falla sigue siendo, para mí, el gran favorito.

Siempre voy a estar de parte del ciclista. Pero voy a ser objetivo y no voy a dejar de decir lo que veo y lo que pienso.

Seguid disfrutando de La Vuelta 2015,