Vuelta a la Comunidad Valenciana 2016: Poels pide Giro y Vanderbergh despierta en Valencia

Sir Dave Brailsford es al ciclismo actual lo que Pep Guardiola fue al fútbol desde su llegada al banquillo de Fútbol Club Barcelona. El ideólogo del Team Sky, quien, como Pep con Leo Messi, también transformó a Bradley Wiggins en 'falso 9' para ganar un Tour de Francia, dijo antes de iniciar 2016 que esperaban que el actual fuera el mejor año de su carrera. Las victorias en este arranque de curso le están dando la razón: Wouter Poels, un peón convertido en campeón en la Vuelta a la Comunidad Valenciana o Chris Froome en la otra parte del planeta ganando el Herald Sun Tour australiano, previa victoria de etapa con Peter Kennaugh.

El Sky, como el Barça de Pep -o como el actual del ciclista Luis Enrique- está en disposición de ganar un triplete, un sextete, o lo que venga. Wouter Poels ha dominado esta Vuelta a la Comunidad Valenciana desde que selló su victoria en la contrarreloj de Oropesa, mantuvo su ventaja en el alto de Fredes y asestó un duro golpe a Fabio Aru y el Astana en los desniveles de Xorret de Catí. Dominando de principio a fin a sus rivales, como hicieran Wiggins o Chris Froome en los últimos Tour de Francia y como es el sello de este equipo que, en este 2016, aún cuenta con más efectivos y con más ciclistas ganadores.

El debate que se inicia tras la victoria de Poels en Valencia es si el holandés está en disposición de ser el líder del equipo en el Giro de Italia o si por el contrario tiene que ser el recién fichado y tercero en 2015, Mikel Landa. Es una decisión más guardiolesca que salomónica, y Sir Dave Brailsford tendrá que tomar en las próximas semanas.

Vanderbergh luchó contra un plástico

El gigante Stijn Vanderbergh (Etixx-Quick Step) sorprendió al Cofidis de Nacer Bouhanni en el circuito urbano de Valencia. Otro peón habitual de Tom Boonen y de sus líderes que cogió ventaja en la última vuelta y al que le tocó luchar contra el desordenado grupo perseguidor y contra una enorme bolsa de plástico que se enganchó a su rueda trasera. Acostumbrado a trabajar y a perder grandes carreras por muy poco, el belga se llevó un premio inesperado.