Un Bayern con reminiscencias del primer Barcelona de Guardiola

En su primera temporada en el Bayern de Múnich, Pep Guardiola ha conquistado la Bundesliga en tiempo récord, gracias a unos registros sin precedentes en Alemania. La contundencia de su equipo recuerda a la del Barcelona que conquistó el triplete en la temporada 2008/09. ¿Qué hay de común entre ambos equipos? Cinco años después, Guardiola ha importado algunos aspectos de aquel equipo.

Una defensa de confianza. En su primer año con el Barcelona, Dani Alves, Puyol, Piqué y Abidal condormaron una zaga de garantías para Guardiola. Rafa Márquez era el quinto en discordia, si bien el mexicano alternó su puesto en el centro de la zaga con el de pivote defensivo. Las sanciones y lesiones obligaron a recursos de urgencia como los de Yaya Toure o Abidal como centrales. Ahora, con el Bayern, Alaba, Rafinha, Boateng y Dante son cuatro de los seis futbolistas con más minutos del Bayern en la Bundesliga.

Un delantero goleador… y problemático. Samuel Eto’o fue el máximo artillero del Barcelona en el primer año de Guardiola con 30 goles. Sus desavenencias con el camerunés derivaron en su salida al terminar esa temporada rumbo al Inter de Milán. En esta nueva aventura, su ‘killer’ es Mario Mandzukic. El croata acumula 17 tantos en lo que va de Bundesliga pero su relación no es para nada idílica y los enfados entre ambos se han repetido en varias ocasiones, provocando el delantero pudiera abandonar la disciplina bávara el próximo verano.

Un recurso táctico magistral. Quizá el sello de distinción en ambos equipos, el toque final con el que Guardiola puso la guinda a su obra maestra. En Barcelona, atinó al reconvertir a Leo Messi en falso 9, acercándole más al gol y poniendo la semilla de sus espectaculares números en temporadas posteriores. En Múnich, su gran acierto fue transformar a Philipp Lahm en mediocentro, pese a que era uno de los mejores laterales del planeta. Su rendimiento en la medular ha sido una gran sorpresa para todos y un pilar en los éxitos del Bayern.

Un cerebro de confianza. Xavi Hernández fue desde la llegada de Guardiola el gran faro que iluminó el juego azulgrana. Su personalidad y su visión de juego le hicieron llevarse muchos elogios por encima de otros futbolistas. En el Bayern, Guardiola ha tirado de un hombre de confianza, Thiago Alcántara. Curiosamente, el centrocampista apenas disputó 16 minutos con Guardiola en su primer año como azulgrana, pero Pep supo ver en él el timón que sostendría al Bayern por juventud, personalidad y calidad.