Copa del Rey (Semifinales, vuelta): Alavés-Celta: Una final gloriosa (1-0, global 1-0)

PorDavid Orenes

Actualizado 08/02/2017 a las 23:21 GMT+1

Un gol de Édgar Méndez a los tres minutos de entrar al campo da al Deportivo Alavés el pase a la gran final de Copa del Rey por primera vez en su historia. Los de Mauricio Pellegrino hicieron bueno el 0-0 en Balaídos y, en un partido igualado, consiguieron el gol en una gran jugada del canario tras peinada de cabeza de Camarasa. El Alavés se enfrentará en la final del 27 de mayo al Barcelona.

El Alavés celebra un gol ante el Celta que le mete en la final de Copa

Fuente de la imagen: AFP

FICHA DEL PARTIDO

1 - Deportivo Alavés: Pacheco; Kiko Femenía, Laguardia, Feddal, Theo; Marcos Llorente, Manu García; Camarasa, Ibai (Vigaray, min. 88), Toquero (Méndez, min. 78, Alexis, min.93) y Deyverson.

0 - Celta: Sergio; Hugo Mallo, Cabral, Roncaglia, Jonny; Marcelo Díaz (Guidetti, min.82), Radoja; Bongonda (Sisto, min. 74), Pablo Hernández, Wass (Rossi, min.85); y Iago Aspas.

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Gol: 1-0, m.81: Méndez.

Árbitro: Mateu Lahoz (Valenciano). Amonestó a los locales Feddal (min. 38) y a los visitantes Aspas (min. 38) y Díaz (52).

Incidencias: Partido de vuelta de las semifinales de la Copa del Rey disputado en Mendizorroza ante 19.307 espectadores, de los cuales cerca de 700 seguidores fueron celtiñas.

PERSONAJES

Fernando Pacheco. Muy seguro durante todo el partido, salvó la ocasión más clara para el Celta en la primera parte en un remate a bocajarro de Iago Aspas. Estám siendo la gran revelación en España en cuanto a guardametas se refiere.

Edgar Méndez. Entró al campo en el 79' y en el 82' recibía un balón que convirtió en gol con una jugada magnífica entre varios defensores del Celta. Luego se retiró lesionado, como un héroe.

Mauricio Pellegrino. Cogió a un equipo que poco se parecía al que había ascendido a Primera, con hasta 19 fichajes y muchas dudas. Hoy el Alavés es una de las revelaciones de la Liga y es finalista de Copa del Rey.

NUDO

Era ésta la 'otra' semifinal. La de dos equipos que no están acostumbrados a la gloria. Que ven como los grandes se llevan todo el botín cada temporada. Que ven casi una hazaña llegar a una final con colosos como Real Madrid, Barcelona o Atlético. Con la ilusión por las nubes, Alavés y Celta se enfrascaron en una eliminatoria tan seria como igualada.

Sin embargo, siempre dio la sensación de que el equipo de Pellegrino jugó más con el corazón que el de Berizzo. En los comienzos de las dos partes entraron a cuchillo, como si les fuera la vida de ello, tratando de coger frío al Celta. En la primera mitad no lo consiguieron, y los vigueses apaciguaron el temporal e hicieron suyas las mejores ocasiones. Pacheco salvó la más clara con una parada tan histórica como decisiva.

Pero, tras el descanso, el Alavés empujó de tal forma que fue imposible detenerle. Camarasa, probablemente el mejor de partido, fue un peligro constante apareciendo tanto en bandas como por el centro. En una de ellas, peinó un balón largo al más puro estilo Iborra y apareció Edgar, tan solo tres minutos antes en el banquillo, para enchufar un golazo a poco del final.

Fue entonces, cuando la hipotética prórroga se esfumó, cuando Berizzo sacó a toda la artillería. Mateu Lahoz hio seis minutos de añadido, pero el 2-0 siempre estuvo más cerca que el 1-1. En el pitido final, un equipo, un estadio y una ciudad que hace un año estaba en Segunda División escribió una de las páginas más bonitas de su historia: Jugarán una final de Copa del Rey.

NUESTRA OPINIÓN

El Alavés se clasifica por primera vez para una final de Copa con todo merecimiento, después de firmar una temporada inolvidable. Pese a la poderosa apariencia del rival, no hay que olvidar que el equipo vasco ya venció al Barça en el Camp Nou con todas las de la ley. Tienen derecho a soñar.

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