Blog Romero: La maldición del brazalete blanco

El brazalete de capitán del Madrid siempre ha estado rodeado de una mística acojonante, apoyada indudablemente en la cantidad de títulos que el club tiene en su Museo. Desde la llegada de Florentino Pérez al sillón presidencial tres futbolistas han sido los "capos" del vestuario gracias a su regularidad como futbolistas de la primera plantilla: Hierro, Rául y Casillas. Tipos diferentes y con distintas formas de asumir el gran honor y la tremenda responsabilidad que supone ser capitán blanco.

Eso sí, los tres tienen en común el haber mantenido una relación fría tirando a tensa con Florentino Pérez. Hierro se fue finiquitado después de una discusión a gritos con el presidente que se produjo en una cena en un restaurante tras haber conquistado una campeonato de liga y que no hubo necesidad de filtrar a la prensa, porque estábamos fuera esperando y los gritos se escucharon sin tener que arrimar la oreja a la pared. 

A Raúl,heredero de la capitanía cercano a la manera de proceder y pensar de Hierro, se le despidió con una rueda de prensa desanjelada en un mes de Agosto. El club comunicó tarde y mal que se iban a abrir las puertas del Bernabéu pero solo unos pocos se enteraron y tuvieron tiempo de entrar para presenciar un acto que no estuvo a la altura de lo que merecía el 7. Tres años después, Raúl volvió con el Schalke a un Trofeo Bernabéu y la gente le pudo mostrar reconocimiento y gratitud con 3 años de retraso. 

Como todo es susceptible de empeorar, con Iker la cosa tiene todavía peor pinta. Dentro de la lógica lucha de intereses que mantienen dos partes que se van a separar en el camino, el trato que ha recibido en los últimos años el mejor portero de la Historia de nuestro fútbol ha dejado mucho que desear. Florentino solo salió a defender al capitán cuando no había torniquete posible para frenar la hemorragia. Casillas saldrá, en el mejor de los casos, igual de mal que lo hicieron en su día sus dos antecesores. 

Y para completar el cuadro aparece Ramos, que tiene pinta de que puede salir "malamente" del club antes incluso de haber estrenado brazalete en propiedad. Ser capitán del Madrid con Florentino al mando es una quimera.