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Australian Open 2017, Bautista-Raonic: El sueño acabó a cañonazos (6-7(6), 6-3, 4-6 y 1-6)

Cristian Maxedo

Actualizado 23/01/2017 a las 11:59 GMT+1

Milos Raonic doblegó a Roberto Bautista en los octavos de final del Australian Open 2017 (6-7(6), 6-3, 4-6 y 1-6). El canadiense, número tres del mundo, sufrió más de la cuenta en las dos primeras mangas ante un español que batalló lo que pudo pero que vio cómo se esfumaba su sueño de meterse por primera vez en cuartos de final de un Grand Slam con los cañonazos al servicio de su rival.

Roberto Bautista

Fuente de la imagen: EFE

PERSONAJES:
Roberto Bautista-Agut: Batallador y aguerrido hasta que el cuerpo dijo basta. Hizo sudar a su rival en los dos primeros sets, pero su juego de fondo de pista y su saque colocado se acabaron cuando Raonic empezó a acumular puntos de saque directo. En Roland Garros tendrá una mejor oportunidad de meterse en cuartos de final de un Grand Slam por primera vez.
Milos Raonic: Candidato a todo. Pese a iniciar el partido titubeando logró meterse en la antepenúltima ronda gracias al cañón que tiene en su saque. 33 aces (18 en los dos últimos parciales) y un casi-rosco final fueron suficientes para presentar su candidatura al título en Melbourne y conseguir así su primer título de Grand Slam.
NUDO:
El partido de octavos de final del Australian Open 2017 arrancó según el guion esperado. Raonic ‘disparando’ servicios a más de 200km/h ante un Bautista que se defendía como podía. Pero lo que ganaba con su saque no terminaba por concretarlo al resto donde solo ganó una de las once bolas de break de que dispuso. Esto hizo que se llegara con máxima igualdad a los momentos decisivos.
Con el 4-4 cambió todo. Sirviendo Raonic, Bautista pidió un challenge que el árbitro no concedió, alegando que el español se había movido antes de pedirlo. Esto provocó una fuerte discusión entre ambos y acabó desestabilizando al español, que pese a forzar la muerte súbita y disponer de un 5-1 arriba, acabó perdiendo la primera manga.
Pese al varapalo que supone perder un set que tenía ganado, Bautista se repuso y gracias a dos breaks se apuntó la segunda manga (6-3) ante un Raonic que empezaba a bajar sus prestaciones en el servicio (4 aces por los 11 del primer tanteo).
En la tercera manga, máxima igualdad entre ambos tenistas y vuelta al guion original: Raonic muy efectivo con su servicio (10 aces) ante un Bautista certero en el intercambio de golpes desde el fondo de la pista. Pero todo, como la vida misma, se decidió por un detalle y el canadiense aprovechó su única bola de break para firmar un 4-6 en la tercera manga.
A partir de ahí, Bautista se diluyó. Raonic tomó la iniciativa, con el techo retráctil de la Hisense ya cerrado, y el canadiense se puso 0-3 arriba con 3 saques directos y 100% de puntos ganados al servicio. Al español le empezaron a pesar las piernas para terminar por ver cómo su sueño de meterse por primera vez en los cuartos de final de un Grand Slam se moría. Está en clara progresión y en Roland Garros, y sobre una superficie más propensa, podrá desquitarse.
Nuestra opinión: Bautista sigue creciendo y tras Nadal, se ha confirmado como el segundo español a día de hoy en cuanto a juego y regularidad. El envite ante Raonic cayó por quinta vez del lado del canadiense que en pista rápida y con un servicio tan potente como colocado, sigue siendo demasiado para el español.
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