Chuso García Bragado, del infierno de Doha al sueño de Tokio 2020: "Ayudará para el año que viene"

Años y años de trabajo tienen su premio, y en el caso de Chuso García Bragado los años podrían decirse décadas. El español con más Juegos Olímpicos a sus espaldas que no se cansa de marchar por todo el mundo pese a sus 50 años y al excesivo esfuerzo físico que requiere su deporte, en competición y en entrenamiento. En el pasado Mundial de Doha las condiciones climáticas convirtieron su prueba en el mayor infierno posible. Más de cuatro horas de esfuerzo bajo el calor y la humedad del desierto de Catar, en una competición que se caracterizó por los abandonos e imágenes dramáticas y en la que sólo 28 marchadores acabaron de los casi 50 que comenzaron la prueba.

Chuso García Bragado fue octavo consolidándose como uno de los mejores atletas de la historia de nuestro país. Esa posición le deja casi clasificado para Tokio 2020, una competición que serían sus octavos Juegos Olímpicos. Antes, debe lograr la mínima que está en 3:50:00, algo para lo que ya está preparándose, sólo semanas después del infierno de Doha. Para el Mundial y sus condiciones Chuso tiró de cámaras de calor y preparación extrema... lo que llegó allí era peor de lo que se imaginaba. Sin embargo, el esfuerzo ha merecido la pena.

Si consigue su plaza para Tokio 2020 serían los octavos Juegos Olímpicos de Chuso. El marchador analiza para Eurosport sus siete presencias anteriores marcadas por la inexperiencia, el miedo a la eliminación y el dopaje ruso.