El anfitrión Gran Canaria se mide a un Fuenlabrada que quiere aguar la fiesta

Las Palmas de Gran Canaria, 15 feb (EFE).- El Herbalife Gran Canaria pretende eliminar este viernes al Montakit Fuenlabrada en la ronda de cuartos de final de la Copa del Rey y avanzar hasta la ronda de semifinales al calor de sus aficionados, frente a un equipo madrileño que llega a la isla con la intención de aguar la fiesta.

El anfitrión del evento copero afrontará el choque en uno de sus mejores momentos de la actual temporada, clasificado para los cuartos de final de la Eurocopa y en puestos de 'play-off' al título de Liga, tras imponerse el pasado domingo en la cancha de su rival de Copa de este viernes.

El técnico de Herbalife, Luis Casimiro, ha recuperado además efectivos en las últimas jornadas, y únicamente no podrá disponer del alero catalán Oriol Paulí, lesionado de larga duración en un entrenamiento cuando se encontraba en un dulce momento de juego en el presente curso.

Uno de esos jugadores que podrán ser de la partida tras superar sus molestias es el francotirador sueco Markus Eriksson, capaz de decidir un encuentro si muestra su habitual acierto anotador.

El Montakit Fuenlabrada, cabeza de serie de esta Copa del Rey gracias a su gran primera vuelta de la Liga Endesa, quiere dar la campanada.

Los pupilos del argentino Néstor 'Che' García viajaron a Gran Canaria llenos de ilusión por un torneo al que llegan por primera vez en la historia del club entre los cuatro mejores, y en el que nunca han logrado la victoria en sus cuatro participaciones anteriores, con tres derrotas ante el Real Madrid y una ante el Barcelona.

Que su rival sea el conjunto local le añade un extra de dificultad a la empresa, sabedores que la mayor parte de la grada estará en su contra, pero confían en ser capaces de llevar el partido a un final igualado en el que la presión del Herbalife por no fallar ante su público pueda resultarles favorable.

Los precedentes de este duelo en la Liga Endesa tampoco ayudan al Montakit, que ha caído con el conjunto que dirige Luis Casimiro en los dos enfrentamientos ligueros que han tenido esta temporada, en ambos con marcadores abultados: un 87-65 en el Gran Canaria Arena en la primera vuelta, y un 66-86 hace apenas cinco días en el Pabellón Fernando Martín.

Mejorar la intensidad defensiva será clave en el duelo de este viernes, en el que además el Fuenlabrada necesitará la mejor versión de sus líderes: el escolta croata Marko Popovic (12 puntos el domingo), el congoleño Christian Eyenga (17 puntos en el último duelo) y el mexicano Paco Cruz (9).

Junto a ellos, los rebotes del pívot montenegrino Blagota Sekulic y el ala-pívot estadounidense Ian O'Leary, la intensidad defensiva del base venezolano Gregory Vargas y la energía del polivalente alero letón Rolands Smits son los puntales de este Montakit Fuenlabrada que llega sin lesiones ni complejos y aspira a estar en la pelea hasta los minutos finales del partido.

A su favor juega el historial de la Copa del Rey, que dice que el anfitrión no gana el torneo desde hace 16 años (desde el TAU en la fase final de Vitoria 2002) y que en tres de las últimas cuatro ediciones el equipo que jugaba en casa se quedó en cuartos de final, casos del Obradoiro en La Coruña 2016, el Gran Canaria en 2015 y el Unicaja en Málaga 2014.

Lograr el triunfo sería histórico para el Fuenlabrada, que nunca ha superado los cuartos de final y rompería una racha de ocho años sin ganar en Las Palmas.

Ese último triunfo data del 13 de diciembre de 2009, cuando el entonces Ayuda en Acción Fuenlabrada venció por 70-77 en un partido en el que llegó a tener 20 puntos de diferencia, con 21 puntos del escolta americano Gerald Fitch y 19 del pívot uruguayo Esteban Batista. En total, en 20 visitas del Montakit a la isla ha logrado cinco victorias frente a 15 triunfos locales.

Tanto Néstor García como el líder de su equipo sobre el parqué, Marko Popovic, han insistido que el Fuenlabrada no ha ido de turismo a Gran Canaria. Este viernes les tocará demostrarlo ante el anfitrión.