Pau Gasol no se olvida de sus obligaciones humanitarias en vacaciones

Muchos deportistas de élite suelen tener unas vacaciones llenas de lujo y de sitios paradisíacos. Lo hemos podido ver durante todo el verano con futbolistas tanto mundialistas como no. Vacaciones en Ibiza o destinos tropicales.

En la casa de los Gasol parece que las vacaciones funcionan de otra manera. Ya pudimos ver hace unos meses al pequeño de los Gasol, Marc, ayudando en labores humanitarias en el mediterráneo a bordo de un barco que rescataba a personas del mar. Esta vez ha sido Pau el que ha acudido a atender asuntos de carácter humanitario.

Pau Gasol, embajador de UNICEF Comité Español, convivió con niños y familias rohinyás refugiados a causa de la violencia en su país de origen, Myanmar. En los asentamientos que Pau ha visitado viven más de 506.400 personas, de los cuales la mitad son niños.

"Todos los niños rohingya merecen una oportunidad, merecen crecer con sus familias en un lugar seguro donde se reconozcan sus derechos. Hoy he podido jugar y vivir momentos estupendos con ellos". "He descubierto el rol fundamental que juegan las mujeres, y he conocido el trabajo que UNICEF está haciendo por estos niños y niñas para protegerlos, para que puedan seguir con sus estudios, para que tengan acceso a salud, nutrición, agua potable. Pero, a pesar de todo, ese trabajo tan fundamental para su supervivencia y bienestar, necesitan más ayuda", declara Pau Gasol en un vídeo compartido en sus redes.

La crisis rohingy comenzó hace un año, en agosto de 2017, cuando más de 706.000 rohingyas se vieron obligados a huir de la violencia en Myanmar y cruzar la frontera hacia Bangladesh. De estos, 381.240 son niños. Están viviendo en refugios temporales que ellos mismos han fabricado con los materiales que han ido encontrando en su camino: barro, postes de bambú, pedazos de lona y bolsas de plástico. La mayoría de los refugios están ubicados en laderas con alto riesgo de sufrir deslizamientos de tierra, más aún ahora en la temporada de monzón.