Llega la segunda pata de la Triple Corona

Foto: Matt Slocum/AP/Press Association Images

El hipódromo de Pimlico en Baltimore (Maryland, Estados Unidos) ultima sus preparativos de cara a la celebración el próximo fin de semana de la edición número ciento cuarenta y dos de la Preakness Stakes. Todos los ojos estarán puestos en Always Dreaming, el caballo ganador del Derbi de Kentucky, y que ahora deberá vencer a otros diez ejemplares para llevarse la victoria en la Preakness Stakes, una carrera clasificada dentro del Grupo I en la que sólo pueden participar caballos de tres años que sean pura sangre.

Tiene un recorrido de 1.900 metros y su dotación económica es de un millón y medio de dólares (1.372.000€ aproximadamente); la importancia de esta carrera es enorme pues representa la segunda pata de la Triple Corona de los Estados Unidos, todo un clásico en el turf americano y el sueño de muchos propietarios.

El día anterior a la Preakness tendrá lugar otra importante carrera, nada menos que la Black-eyed Susan Stakes, reservada a potrancas de tres años de edad y que este año celebrará su edición número noventa y tres. La Black-eyed Susan Stakes se disputó por primera vez en el año 1919 y se la conocía como la “Pimlico Oaks”, en atención al nombre del hipódromo.

En la década de los cincuenta se cambió su nombre por el actual, ya que las guirnaldas de flores que lleva el vencedor de la carrera están hecha con estas flores, típicas de esa región de los Estados Unidos. La carrera está clasificada en el Grupo II y tiene un recorrido total de 1.800 metros. La bolsa de premios asciende a quinientos mil dólares (aproximadamente 450.470€).

En ambas carreras estará presente un año más la firma relojera Longines en calidad de patrocinadora y cronometradora oficial.