La anécdota más famosa de Bahamontes: La explicación de cuando se paró a tomar un helado en el Tour de Francia

PorEurosport

Actualizado 08/08/2023 a las 18:06 GMT+2

Una de las grandes anécdotas que siempre acompañaron la carrera de Federico Martín Bahamontes fue el supuesto helado que se comió en una de las cimas del Tour de Francia tras un ataque en el que dejó atrás a sus rivales. Este hecho se magnificó en la prensa de la época y, a caballo entre la épica y la exageración, el motivo de ese parón respondió supuestamente a una avería de su bicicleta.

Federico Martín Bahamontes, en el Tour de Francia

Fuente de la imagen: Getty Images

¿Se paró Federico Martín Bahamontes en la cima del Col de Romeyère a comerse un helado tras coronar el alto en primer lugar para esperar a sus rivales? Esta escena, a caballo entre el mito y la realidad, sucedió en el Tour de Francia de 1954, año en que el ciclista toledano hizo su debut en la carrera más importante del mundo.

Los hechos que se cuentan de esta etapa fueron los siguientes: atacó en esa ascensión, se marchó del pelotón y, de repente, sorprendió a los aficionados allí presentes cuando le vieron sentado en la cuneta mientras se comía un helado.

Ese refrescante avituallamiento lo habría comprado un aficionado a un heladero que tenía un carrito en esa cumbre para abastecer a los allí presentes y sofocar la canícula del mes de julio francés. Y después, se lo ofreció al ciclista español para que se sofocara su calor.

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Más o menos, esto fue lo publicado en la prensa de la época y lo que llegó a España, una anécdota convertida en leyenda de Bahamontes yendo de sobrado y esperado desafiante al resto de rivales. Mientras ellos sufrían por alcanzarle, él se comía un helado como gesto de superioridad.

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Bahamontes confirmaría años más tarde que no paró a refrescarse por el helado, sino que tuvo que detenerse forzosamente para poder reparar la rotura de dos radios de una de las ruedas de su bicicleta.

Una avería mientras subía el puerto, según recuerdan varias informaciones publicadas a posteriori y que trataron de poner menos leyenda popular y más veracidad a este parón de Bahamontes.

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