Freire se desquita en Caen

De la maldición del quinto hemos pasado a la alegría del cinco. El "numerito" ha estado a punto de ser "gafe" para el ciclismo español representado en este Tour 2006. Menos mal que Óscar Freire (Rabobank) se ha encargado de desterrar las energías negativas que ha transmitido esta cifra en lo que llevamos de Tour.

Y es que el corredor cántabro ha tenido que esperar cinco largas etapas para imponerse en el Tour. Esta es su segunda victoria en la ronda gala. En Caen se ha impuesto a Tom Boonen (Quick Step) y a Iñaki Isasi (Euskaltel) y de esta forma ha despejado el infortunio que han vivido Alejandro Valverde y Egoi Martínez como quintos de la general.

Valverde se fue a casa por una maldita caída siendo quinto de una clasificación general en la que prometía escalar posiciones. Egoi Martínez le daba el relevo en esa privilegiada posición, pero en la quinta etapa ha perdido sus privilegios por otra caída.

El corredor español del Discovery se iba por los suelos en los últimos kilómetros. Menos mal que ha podido finalizar al menos a 1:16 del ganador de la etapa. No será quinto de la general, pero sigue en carrera. Ojo amigos, ese honor le corresponde ahora a Thor Hushovd, que ha empezado gafado este Tour con corte en el brazo y con problemas en su pedal automático para terminar una etapa.

Con todos estos precedentes, la alegría de Óscar Freire al término de la jornada era más que evidente. Le ha costado, pero al final lo ha conseguido después de rozar el palo en la etapa anterior. "Todos los esprints son complicados. Estaba bien colocado, he aguantado muy bien. Lo he intentado y me ha salido esta vez. Mi ambición ahora es la de conseguir más victorias de etapa en el Tour. Para el maillot verde hace falta un equipo que trabaje para ello y nosotros estamos más volcados en la clasificación general con Denis Menchov. Para mí, el objetivo del año también sería luchar por el Campeonato del Mundo, que sería maravilloso", indicaba el cántabro en la meta de Caen.

Freire obtiene aquí su quinta victoria del año. En este caso el número no importa.

Etapa calcada a las anteriores. Una vez más, y en vista de la longitud de la etapa de hoy con más de 220 kilómetros, los escarceos desde el banderazo de salida han vuelto a ser la tónica general de la jornada. Desde los inicios se ha formado un grupo de unos 7 corredores de los que después solo dos se han quedado en cabeza: Samuel Dumoulin (AG2R) y Bjorn Schröder (Milram). Estos dos corredores han tenido más de 12 minutos de ventaja sobre el pelotón.

Una ventaja que, como era lógico, ha ido disminuyendo con el paso de los kilómetros. Quick Step controlaba el tempo de la carrera con un Tom Boonen, líder provisional, bien situado en las primeras plazas para evitar cualquier peligro. El resto de equipo interesados en llegar al esprint no se ha puesto a trabajar hasta a falta de 30km para el final de la jornada.

La noticia del día se producía a menos de 20km para la meta. Egoi Martínez (Discovery) daba con sus huesos en el suelo. El que fuera protagonista en la cuarta etapa al estar fugado casi toda la jornada, se iba por los suelos en el peor momento. Justo cuando el pelotón marchaba lanzado a la caza de los dos fugados. El corredor del Discovery perdía contacto con el pelotón y al final entraba en meta a más de 1 minuto del ganador de etapa. La quinta plaza de la general se ha esfumado.

Ajeno al sufrimiento del español, la fuga del día tocaba a su fin a falta de unos 5 kilómetros para meta. Después, lo de siempre. Nervios, más caídas y esprint. Esta vez el turno le tocaba a Óscar Freire (Rabobank), que se imponía a Tom Boonen (Quick Step) y a un valiente Iñaki Isasi (Euskaltel) que hoy se ha codeado con los mejores. Victoria de Freire, triunfo del ciclismo español.