Tour de Francia 2018 (7ª etapa): Groenewegen silencia el duelo Gaviria-Sagan

Dylan Groenewegen: Con el Lotto tirando sin sentido (?) desde el inicio de la etapa, quedó claro que en el equipo holandés había tenido unas palabras para reaccionar y mejorar sus resultados en el Tour. Lo confirmó Groenewegen con un esprint excepcional que le dio la victoria.

Yoann Offredo: Valiente y feliz intentó la más difícil. Escapada en solitario en una etapa de más de 200 kms. Sin ayuda era absolutamente imposible y el pelotón le dejó hasta 10 minutos de ventaja consciente de las circusntancias. Cuando comenzaron a reducirle tiempo dejó una imagen muy llamativa. Hablaba con el coche de equipo, que le animaban a seguir tirando y se reía porque sabía perfectamente que no iba a pasar.

Tras dos jornadas de intensos finales, incluida la primera toma de contacto con la media montaña, la ronda gala afrontaba su etapa más larga. 231 kilómetros con una cota de 4ª categoría, sin dificultad ninguna, que presagiaban un nuevo duelo Sagan-Gaviria.

Los intentos de fuga duraron poco y fueron siempre en solitario, los que fructificaron, con lo que menos opciones tenían aún de extenderse. Con más de 100 kilómetros en las piernas llegó el susto general. Aunque el peligro de abanicos estaba previsto para la parte final de la etapa, en el ecuador de la misma regresó la tensión al pelotón.

AG2R y Trek trabajaron con mucha intensidad y se dieron hasta dos cortes en la parte trasera. Rápidamente se formaron dos pelotones y la diferencia entre ambos llegó a un minuto. No pasó de ahí, había nombres como Dan Martin, Ilnur Zakarin o Mark Cavendish. Pero nada lo suficientemente importante como para que los grandes equipos trabajasen más.

Finalmente la etapa llegó como era esperado, con todo el mundo con los cuchillos afilados para el esprint final. El esperado duelo entre los dos nombres que ya han firmado un doblete volvía a repetirse en los metros finales pero un invitado se colaba en la pelea. Dylan Groenewegen se agarró a la rueda de Kristoff y por todo el centro saltó superando a todos y por mucho a Gaviria, quien marchaba primero en los metros clave. Sagan, un pelín cerrado, tampoco eligió el mejor momento al estar más pendiente de seguir al colombiano que de la imagen global.