La opinión de Luis Jiménez | El Tour de Tadeo y Jonas: 2ª semana

Martes. Uno de esos días emotivos en el Tour. Era un día diseñado para la fuga y así sucedió. Victoria en solitario en Issoire para Pello Bilbao con una dedicatoria muy especial para su amigo, Gino Mader. Reconozco que alguna lagrimilla cayó cuando escuchábamos a Pello en la entrevista posterior, con la voz entrecortada.

Nota mental: el ciclismo es como un diablillo travieso que juega con nosotros. Cruel hasta el dolor con la caída de Cavendish, generoso con Pello para liberar de la presión de ganar una etapa tan especial.

Miércoles. Está claro por si quedaba alguna duda: Jasper Phlipsen es el mejor sprinter del mundo. Fin del debate. En Moulins, y sin ayuda en esta ocasión de MVDP, el belga no tuvo rival así que ya acumula cuatro triunfos. Tan quemados tiene al resto, que Fabio Jakobsen ha decidido poner punto y final a esta tortura de Tour. Con las secuelas arrastradas de una fea caída al inicio de la carrera, peleando cada día por no entrar en el fuera de control, el bueno de Fabio se marcha a casa. Otro año será…

Nota mental. Lo de la salida del Tour de Van Aert para ser papá está dando más juego que la boda de la Falcó con Onieva. Por hacer una gracia, Skjielmose lanzó el rumor en une tele danesa de que Wout dejaba el Tour de manera inmediata. Se lio una buena, tanto que el propio Van Aert como su equipo tuvieron que esforzarse en desmentir el cotilleo. Skjielmose vio obligado a pedir disculpas por la broma ¡Sálvame traspasa fronteras!

Jueves. El Tour llegaba a tierra de buenos vinos, a Belleville en Beaujolais y, como sucede con los buenos caldos, son mejores cuando llegan a su punto de maduración óptimo. Pues eso sucede con el ganador del día, Ion Izaguirre, 34 tacos y dos triunfos ya en el Tour. El duelo entre los gallos, en estado de espera esperando la llegada del trío de etapas salvajes del fin de semana.

Nota mental: Vale, que son dos victorias de ciclistas españoles en este Tour. Vale que el ciclismo español no agoniza lentamente como muchos agoreros gustan afirmar (que los Ayuso, Arrieta, Rodriguez, Raúl García son rematadamente jóvenes y buenos), pero agitar al personal con la especie de que el ciclismo español goza de una salud excelente, es también un pelín exagerado, ¿no? Contención, señores, contención. Mañana llega el Grand Colombier, ¿pasarán cositas?

Viernes. Otro veterano del Vietnam que se empeña en brillar en el universo de los killers veinteañeros: Michal Kwiatkowski ganaba a lo grande en las preciosas y duras ‘lacets’ del Colombier, también su segundo triunfo en el Tour ¿Y de los gallos, qué? Pues un poco lo de siempre, dos equipos que cada vez que pueden muestran todo su potencial de fuego para intentar intimidar al contrario (ver la subida marcando el ritmo de Soler provocaba agujetas…), para dejar los últimos metros reservados a los dos tenores de la carrera. Aquí Pogaçar es casi imbatible, con esos ataques enloquecidos que arañan segundos a la clasificación y, sobre todo, intentan minar poco a poco la moral del danés de hielo ¿Lo conseguirá? Esto es muy largo.

Nota mental. ¿Puede ser cierto que mis castos ojitos hayan visto a un tipo correr enloquecido junto a los corredores enseñando a medio mundo la mitad de su trasero? Admirable la paciencia de los corredores con un gentío que apura hasta el final para apartarse, que toca al corredor y que se exhibe ante las cámaras de estas, como decirlo, peculiares maneras. A este en concreto, es posible que le hubiesen cambiado recientemente la medicación…

Sábado¡Día Grande en Morzine! La tercera victoria para los nuestros en esta locura de Tour. Carlos Rodríguez Cano, AKA, El León de Almuñécar. Caray con el granadino, subiendo con los más grandes los colosos alpinos para hacerse con la victoria. Del duelo estelar, la igualdad máxima sigue siendo el mantra de esta carrera que nos invita a seguir pensando que serán los pequeños detalles los que la decidan.

Nota mental. ¿La infracción de dos motos taponando un ataque de Pogaçar puede decidir un Tour? Quién sabe. Pilotos y fotógrafos fueron sancionados. Mucho público, quizá demasiado o muy mal encauzado. Sensación de que algo malo va a pasar.

Domingo. La partida de ajedrez no da tregua. Ganó Wout Poels en Mont Blanc, una victoria casi clandestina con todos pendientes de Tadeo y Jonas. De nuevo, Pogaçar arrancó en un derroche de vatios, con respuesta inmediata de Vingegaard para que todo quede igual de cara a la última semana: 10”. Y Carlos Rondríguez, imperial para amarrar el tercer puesto en el podio ¡Gracias, señores, por el Tour que nos están regalando!

Nota mental: ¿Para cuándo un control de estúpidos en las carreras ciclistas? El tonto del selfie casi arruina el Tour a medio pelotón. Vingegaard ha pedido que no les lancen cervezas. Y yo me pregunto, ¿son realmente aficionados al ciclismo?