Kopecky reconoce las dificultades y la satisfacción final

Simplemente fuimos un poquito más rápidos esta vez. La última etapa fue muy complicada pero teníamos un gran coche y su rendimiento fue inmejorable para todas las etapas. Dijimos entonces que lo intentaríamos porque no teníamos nada que perder. Y así fue. Lo intentamos y logramos la victoria.

Bueno, un piloto tiene muchos obstáculos en una prueba como la de Austria, especialmente rocas a los lados. Algunas veces creo que no entiendo por qué. Creo que Tarmac tiene una mayor sujeción pero en última instancia empecé a preferir rodar por el campo que por la carretera. Había alguna piedra perdida en mitad del trayecto. Golpeé una de ellas y pinché".

Bohemia y Barum, eso es. Sería precioso poder ganar un campeonato porque aún no sé lo que es ganar un campeonato europeo y sería un sentimiento realmente bonito.

(Pregunta para Pavel Dresler) La nieve y el hielo fueron un factor decisivo el primer día pero luego lo sería la lluvia. ¿Qué dificultad le supuso todo esto?

Fue difícil porque las condiciones en las etapas lo eran. Una etapa era sin nieve, la otra con nieve, una con grava, la otra sin ella. Fue muy complicado para todos los pilotos pero afortunadamente llevábamos neumáticos Michelin, el coche podía con ello y la verdad, Jan Kopecky pilotó de maravilla. Sobre la nieve fue aún más difícil pilotar en primera posición porque de alguna manera marcabas el tiempo a batir para el resto.