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¿Lo sabías? El Gran Premio de Canadá y el día que Kubica volvió a nacer hace ya 15 años

Eurosport
PorEurosport

Actualizado 15/06/2022 a las 18:29 GMT+2

El Gran Circo de la Fórmula 1 regresa al Circuito Gilles Villenueve y es imposible no acordarse del piloto Robert Kubica, mucho más este año que se acaban de cumplir 15 desde que sufrió uno de los accidentes más graves que se recuerdan en la F1 de la era moderna. El polaco no solo salió ileso, sino que un año después se desquitó y logró su única victoria en el trazado de Montreal.

Robert Kubica (BMW Sauber) - GP of Canada 2007

Fuente de la imagen: Getty Images

Robert Kubica volvió a nacer aquel 10 de junio de 2007 durante el Gran Premio de Canadá. El primer piloto polaco en la historia de la Fórmula 1 sufrió un terrible accidente tras chocar contra el muro a unos 280 km/h y salir despedido.
Todo ocurrió en la vuelta 27 cuando Kubica intentaba adelantar a Jarno Trulli. El monoplaza del polaco impactó levemente contra el del italiano y se fue directamente contra el muro. Desde ahí y hasta que aquel BMW se detuvo se vivieron unos segundos angustiosos en el paddock y en los que todos nos temimos lo peor. Sin embargo, las medidas de seguridad de los bólidos de Fórmula 1 funcionaron y no hubo que lamentar ninguna desgracia.
Cuando vi el accidente, pensé que había muerto, al verle sin conciencia. Sin embargo, me le encontré consciente en el coche. El sistema HANS que protege su cuello le ha salvado la vida
Estas fueron las palabras de Ronald Dennis, jefe médico del aquel Gran Premio de Canadá y del departamento de cirugía y de traumatología en el hospital del Sagrado Corazón de Montreal, donde Kubica estuvo ingresado por precaución ya que so terrible accidente se saldó solo con una torcedura de tobillo.
Tanta repercusión tuvo el accidente, que incluso el Vaticano investigó si el papa San Juan Pablo II pudo obrar un milagro y salvarle a Kubica, que solo tenía 22 años de aquellas, de la muerte.
Kubica pronto pudo volver a pilotar y solo se perdió la carrera siguiente, el Gran Premio de los Estados Unidos en Indianápolis, donde fue sustituido por el prometedor Sebastian Vettel. Un año después, el polaco se desquitó y acabó logrando en Canadá, cosas de la vida, su primera y única victoria en la Fórmula 1. Eso sí, lo hizo con un nudo en el estómago al pasar por aquel muro en el que pudo perder la vida unos meses antes.
No sabía qué sentir cuando caminé hacia la horquilla el jueves –en 2008–, a mi regreso al Circuito Gilles Villenueve. El año anterior tuve un accidente grave. Pero, en realidad, la mayor sorpresa fue que no me pasó nada. Tuve mucha suerte. Recuerdo haber mirado el muro que golpeé por primera vez. No hubo emociones negativas. Simplemente seguí caminando y lo olvidé
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