Blog Uría: La historia del 'caso' Gelson Martins

Una tormenta de proporciones bíblicas azotó al Sporting de Portugal hace meses. Críticas, problemas internos, malos resultados, enfrentamientos y sanciones generaron una atmósfera irrespirable en el José Alvalade. Todo empeoró cuando Bruno Carvalho, presidente del club, cargó duramente contra los futbolistas de manera pública, hecho al que le sucedió una salvaje agresión de unos cincuenta aficionados radicales, que se colaron en el vestuario de los jugadores en la ciudad deportiva del club, emprendiéndola a golpes contra los futbolistas. La Guardia Nacional Republicana detuvo a la mitad de los radicales agresores. Entre los agredidos, el entrenador Jorge Jesus, Raúl José, Dost, William Carvalho, Rui Patrício, Acuña o Battaglia, justo antes de la final de Copa. Con el paso de los días, viendo peligrar su integridad, una decena de jugadores del Sporting y su entrenador, Jorge Jesús, tomaron la decisión de rescindir unilateralmente el contrato con la entidad, alegando "causa justa”, acogiéndose a una figura de ruptura de contrato que contempla la FIFA. La desbandada fue imparable: Rui Patricio, Gelson Martins, Willian Carvalho o Podence rompieron su contrato de manera unilateral, denunciando las agresiones a sus compañeros por parte de los radicales Otros, como Bas Dost o Burno Fernandes, que rescindieron tras haber recibido golpes y amenazas de los ultras, dieron marcha atrás y renovaron.

En mitad del terremoto jurídico y social para el Sporting de Portugal, el Atlético de Madrid contactó con el entorno de Gelson Martins y preguntó por la situación de Rafael Leao. El primero estaba a tiro. El segundo negociaba con un club inglés. El Atlético se movió rápido. Sondeó a Gelson, llegó a un acuerdo con él y estudió con la situación jurídica del contrato del jugador, evaluando las posibles consecuencias de su fichaje. Sporting hizo una oferta a Gelson para renovar, ofreciéndole una mejora de sueldo, pero el jugador quería salir de Lisboa y jugar en el Atleti de Simeone. Así que el club rojiblanco entabla negociaciones con Sporting. Le comunica que tiene un acuerdo con el jugador, pero que no quiere perjudicar los intereses del club lisboeta y está dispuesto a negociar una salida amistosa pagando una cantidad por el pase del jugador, para evitar pleitos en los tribunales. Esa fórmula es la que escoge el Real Betis para firmar a William Carvalho, que también había rescindido contrato. En declaración oficial a la CMVM, el Sporting confirmó que traspasaba a William Carvalho por 16 millones de euros más 4 en variables, por el 90% de los derechos económicos del centrocampista. El club lisboeta se reservaba el 25 por ciento de una futura venta. El Real Betis podría adquirir otro 10 por ciento del pase por 10 millones. Así el club bético evitaba cualquier contingencia en los tribunales y en la FIFA. El Atleti, con el ejemplo del Betis candente, mueve ficha. Y Sporting recibe una oferta colchonera por Gelson: 15 millones de euros fijos más 10 variables, 25 en total, por un futbolista valorado en 35 millones de euros en el mercado y con cláusula de 60 kilos. Por otro lado, el Atlético eleva a consultas el caso Gelson con la Federación Portuguesa de Fútbol y la FIFA. La respuesta de ambos organismos no puede ser más favorable: la Federación Portuguesa de Fútbol emite el transfer internacional del futbolista y la FIFA no se opone, con lo cual el club rojiblanco tiene carta blanca para tramitar su fichaje como agente libre.

Toda vez que el Atlético ya tuvo en su poder el transfer del jugador, volvió a ponerse en contacto con Sporting y le instó a aceptar la oferta que había puesto sobre su mesa por el jugador. El club portugués se niega, exige casi 40 kilos por Gelson y amenaza con presentar una queja ante la FIFA, argumentando que acudirá a los tribunales para exigir compensación económica. El 25 de junio, el Atleti hacía oficial el fichaje del jugador en calidad de agente libre, con el correspondiente transfer legal emitido visado por la FIFA y emitido por la Federación Portuguesa de Fútbol. Gelson firmaba 5 temporadas. La reacción del Sporting, la prevista: a través de un comunicado el Sporting se posicionó así: "Dado el comportamiento inaceptable del Atlético de Madrid en el caso Gelson Martins, el Consejo deliberó por unanimidad presentar una queja en FIFA con una solicitud de indemnización al jugador y al club (Atlético de Madrid) y solicitud de sanción deportiva a ambos". Exigen daños y perjuicios, así como el importe íntegro de la cláusula de rescisión, lo que colocaría al Sporting en una posición en la que exigiría un dinero comprendido entre los 60 y los 100 millones de euros. Horas después, el diario luso ‘A Bola’ informó que el Sporting había ofrecido un pacto de última hora al Atleti: que aumentase su oferta a los 40 millones y así se quedaría con el jugador y Sporting retiraría su queja ante FIFA. La respuesta del Atleti fue lapidaria: no había marcha atrás y el jugador era suyo, sin tener que pagar nada de traspaso.

Y ahora ¿qué? Pues el asunto irá a parar a la Cámara de Resoluciones de disputas de la FIFA que, tiene que declararse competente para pronunciarse o no para analizar el caso, ya que FIFA no se pronunciará sobre si Gelson es agente libre o no (ya lo es, porque tiene el transfer internacional), sino que va a tener que pronunciarse sobre si Gelson cumplió o incumplió su contrato con Sporting de Portugal. Después del fallo de la FIFA, sea favorable o contrario a los intereses de Gelson y el Atleti, o del Sporting, ambas partes podrán presentar un recurso ante el TAS (Tribunal Internacional Deporte) después de 21 días. Ese sería el último escenario posible para que el Sporting pudiera cobrar un dinero por Gelson, después de haberse negado a aceptar la oferta que el Atlético hizo por él. El escenario es simple: si FIFA o la justicia ordinaria dan la razón al Sporting en su pleito con Gelson, el Atlético se expondrá al pago de una cantidad importante como indemnización, ya que entienden que el Atleti ha obrado mal y les ha sustraído a un jugador sobre el que todavía tenían derechos, incluso habiendo rescincido contrato. Si no es así, habrá cerrado una operación sobresaliente, fichando sin pagar ni un solo euro por traspaso a un jugador tasado en unos 35 kilos, firmándole 5 temporadas, como agente libre, teniendo en su poder y en regla el transfer que así lo acredita, emitido por la FPF y la FIFA, al tiempo que consideran que han obrado de buena fe, como prueba el hecho de haber ofrecido una cantidad de dinero al Sporting de Portugal por un traspaso, cuando el jugador ya había roto su contrato con ellos. Esta es la historia de Gelson Martins. El tiempo dirá cómo acaba.

Rubén Uría / Eurosport