UWCL, FINAL | Barça-Chelsea: Orgullo del fútbol femenino español

Hace dos años, en Budapest, el Barça se marchaba al descanso de su primera final de Champions con un 4-0 en contra. El todopoderoso Lyon no tuvo piedad con el ‘novato’ y dejó sentenciado el título en una primera mitad devastadora. Fue un repaso que tuvo sus consecuencias, todas ellas positivas: el club azulgrana, en lugar de ahogar penas, comenzó a preparar el camino no solo para volver a una final, sino para ganarla. Han pasado dos años y el Barça se ha plantado en su segunda final… para convertir al Chelsea en el juguete que el propio conjunto azulgrana fue en manos del Lyon.

Había dudas sobre si el equipo de Lluis Cortés iba a ser capaz de trasladar sus espectaculares números en Primera Iberdrola (pleno de victorias en 28 partidos, 128 goles y cinco en contra). Las disiparon todas en el minuto uno, cuando Martens estrelló un balón al larguero y en segunda jugada un rebote certificaba el 0-1. Como si de una jornada de Liga se tratara, las azulgrana fueron un martillo pilón, penalizando a las ‘blues’ en cada acercamiento peligroso.

Jenni Hermoso provocó penalti al cuarto de hora y Alexia Putellas, que fue duda hasta última hora, lo materializó con templanza. Suya fue también la asistencia a Aitana Bonmatí (qué delicia de futbolista) para el 3-0 antes de que Lieke Martens rompiera a su rival en banda izquierda y regalara el cuarto tanto a Caroline Hansen.

La segunda parte fue un quiero y no puedo del Chelsea ante un Barça que tuvo a tiro la ‘manita’ en más de una ocasión, sobre todo al final en un gol que le fue anulado a Oshoala. El FC Barcelona se comportó como un equipo campeón de principio a fin, conquistó un título con el que se había obsesionado (para bien) desde hace años y demostró que es el gran ejemplo para que el fútbol femenino español, ya con su primer título continental, siga creciendo a pasos agigantados. ¡Enhorabuena culés!