El Dépor sigue vivo (2-3)

Dos goles del "rifle" Pandiani, cedido por el Dépor al Mallorca, y otro más de Eto'o parecían sentenciar en Riazor la eliminatoria de semifinales de Copa. El partido estaba 0-3 y no quedaba demasiado tiempo... Pero este Dépor tiene más vidas que un gato. La vuelta, en Son Moix, será intensa: un penalti transformado por Diego Tristán y una jugada del sevillano culminada por Makaay dejan el resultad

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Dos goles del "rifle" Pandiani, cedido por el Dépor al Mallorca, y otro más de Eto'o parecían sentenciar en Riazor la eliminatoria de semifinales de Copa. El partido estaba 0-3 y no quedaba demasiado tiempo... Pero este Dépor tiene más vidas que un gato. La vuelta, en Son Moix, será intensa: un penalti transformado por Diego Tristán y una jugada del sevillano culminada por Makaay dejan el resultado en puro interrogante: 2-3. El Dépor, pese a todo, aún está vivo.
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La Coruña, 5 de febrero.- El Mallorca desaprovechó en los últimos minutos una ventaja de tres goles con la que dejaba prácticamente firmado el pase a la final de la Copa del Rey, ya que un cierto relajamiento del equipo balear fue aprovechado por los gallegos para recortar y distancias en el marcador y mantener vivas las esperanzas de alcanzar la final.
El conjunto dirigido por Gregorio Manzano mostró las mismas armas que utilizó para eliminar al vigente subcampeón, el Real Madrid, en la anterior ronda, y que también funcionaron ante el Deportivo hasta los últimos minutos del encuentro, en los que se escribió la mayor parte de la historia del mismo. Bien armados en defensa y efectivos en ataque, el Mallorca rompió al vigente campeón y logró un 0-3 a los 83 minutos de juego con el que dejaban prácticamente sentenciada la eliminatoria. Pero el Deportivo despertó al final y logró batir por dos veces a Leo Franco dejándola así abierta.
El encuentro resultó igualado en los primeros compases, en los que ambos equipos se repartieron el dominio del esférico. El Mallorca demostró la solidez defensiva que atesora ante todo en la Copa del Rey y logró meter incluso a los locales en su propia parcela poniendo muchas trabas a los de Irureta a la hora de poner el balón en circulación. El ritmo impuesto por el conjunto balear era propicio para alcanzar al menos el objetivo con el que llegaba a Riazor, conseguir un resultado positivo con vistas al encuentro de vuelta, que se disputará el próximo cinco de marzo en Son Moix.
No obstante, los de Gregorio Manzano, a pesar de tener la posesión durante buena parte de la primera mitad, no generaron peligro alguno al meta de la escuadra gallega Juanmi García, que tan sólo tuvo que intervenir, hasta el primer gol, a un disparo de Ibagaza (m.23). Por su parte, pasado el primer cuarto de hora, el Deportivo seguía encontrando numerosas dificultades a la hora de canalizar el juego, aunque, eso sí, pudo adelantarse en el marcador en la primera aproximación clara al marco de Leo Franco (m.21). Tristán regaló un taconazo a la parroquia gallega con el que cedió el balón a Amavisca ante tres contrarios, el cántabro centró al punto de penalti y Luque remató fuera.
SE ECHA DE MENOS A VALERÓN
El Deportivo de los últimos tiempos, por no decir el de toda esta temporada, sigue pecando de lo mismo sin Valerón sobre el césped: una alarmante carencia de ideas en el medio del campo que repercute en la zona ofensiva del equipo, pese a jugar con dos delanteros. Y en medio de ese querer y no poder coruñés, Walter Pandiani aprovechó un error defensivo para asestarle el primero al equipo que le cedió al Mallorca, al que ya le había marcado en el partido de Liga. El uruguayo, en el minuto 36, cabeceó a placer un centro bombeado de Alvaro Novo ante la pasividad de Donato y Juanmi.
Ya en la reanudación, el Deportivo, con Makaay sobre el terreno de juego, encerró al Mallorca prácticamente en su área para intentar empatar el encuentro en base a una mayor presencia atacante. No obstante, paradójicamente, fueron los mallorquines los que gozaron de las mejores oportunidades: primero, Novo envió el esférico al palo (m.51) tras un veloz contraataque, y poco después Juanmi despejó con problemas un disparo a bocajarro de Eto'o.
La furia con la que los blanquiazules iniciaron la segunda parte se fue apagando poco a poco por una perfecta labor defensiva de los isleños, que además continuaron amenazando a la meta de Juanmi a través de los contraataques. Una amenaza que se hizo realidad con los goles de Pandiani (m.81) y Eto'o (m.83), que dejaban sentenciada la clasificación de su equipo a la final.
No obstante, a falta de dos minutos para la conclusión del tiempo reglamentario, un discutido penalti sobre Diego Tristán, que él mismo transformó, dio fuerzas a los deportivistas. El colegiado del encuentro, Esquinas Torres, descontó cinco minutos, y los de Irureta lo aprovecharon para lograr el segundo en el último suspiro del encuentro merced al oportunismo de Makaay, que mantiene vivas las ilusiones de los blanquiazules de alcanzar la final.
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