Un emotivo adiós

El ariete se ha convertido en uno de los jugadores más queridos por la afición. Su excelente comportamiento, unido al excelente rendimiento deportivo que ha ofrecido cada vez que ha entrado al terreno de juego, le han servido para que se convierta en uno de los integrantes más apreciados de la plantilla blaugrana.

Consciente de que el sábado disputaría el último encuentro ante los que han sido sus seguidores, el nórdico volvió a entregarse al máximo y sólo le faltó el gol para despedirse por todo lo alto. Emocionado por la calurosa despedida que le tributaron tanto sus compañeros como por el público, manifestó que: "Ha sido muy agradable. He sentido más alegría aunque también algo de tristeza, pero así son las cosas. La decisión está tomada desde hace tiempo, así que no era ninguna sorpresa que éste fuera el último partido de liga en casa".

El internacional sueco recordó que recibió una despedida similar cuando abandonó el Celtic de Glasgow hace dos temporadas, pero resaltó que allí había estado siete años y, en Barcelona, sólo dos campañas&hellip Y una de ellas, permaneció lesionado durante la mitad del tiempo.

Larsson agradeció el apoyo del público casi desde el comienzo de su etapa en Barcelona, aunque no pudo evitar su malestar por no haber hecho gol en la jugada que dio paso al 2-0 de Ronaldinho. "Tenía que haber marcado, pero estaba demasiado ansioso".