Levante-Barcelona: Adiós culé a la Liga

Levante: Aitor Fernández, Miramón (Coke 74'), Vezo, Duarte (Dani Gómez 62'), Rober Pier, Toño García, De Frutos, Melero, Bardhi (Malsa 62'), Morales y Roger (Sergio León 74').

Barcelona: Ter Stegen, Araujo (Sergi Roberto 46'), Piqué, Lenglet, Dembélé (Dest 80'), De Jong, Busquets, Pedri (Mingueza 73'), Alba; Messi y Griezmann (Braithwaite 80')

Goles: 0-1, Messi (25'); 0-2, Dembélé (33'); 1-2, Melero (56'); 2-2, Morales (58'); 2-3, Dembélé (62'); 3-3, Sergio León (83');

Árbitro: Munuera Montero.Amonestó a De Frutos, De Jong, Morales,

Incidencias: Partido correspondiente a la jornada 36 de Liga en el Ciutat de Valencia.

El partido parecía sentenciado a la media hora de partido porque antes no lo hizo Pedri, que a los cuatro minutos ya había desperdiciado dos ocasiones clamorosas. El canario perdonó la vida a un Levante que juega por inercia ya. Los de Paco López cumplieron el trámite de salvarse y se han quedado en tierra de nadie, lo que le asegura un plácido final de temporada. A ellos y a sus rivales. Sobre todo aquellos que tengan cierta exigencia competitiva como es el caso del Barcelona, que llegaba obligado a ganar para seguir optando al título. Los azulgrana salieron con la agresividad que no demostraron ante el Atlético. Pero los fallos de Pedri no premiaron ese buen inicio. Messi, con su gol número 29 (una barabridad para haber empezado la Liga al trote cochinero), abrió el marcador. Fue con una complicada volea en la que sacó petróleo de un rebote. Ocho minutos después Leo servía un balón profundo a un Dembélé que mostró su velocidad con toda la banda para él. El francés la puso atrás y esta vez sí acertó Pedri. Partido cerrado en el minuto 33. Porque el Levante no sacó el colmillo ni metió la cuarta ni la quinta. Un disparo de Bardhi fue lo único destacable del conjunto granota en la primera mitad.

Pero este Barcelona es indescifrable. Un disparo de Messi saludó el inicio de la segunda mitad, pero luego fue perdiendo efervescencia y se contagió de la dejadez granota. Y en esas un centro al área desnudó las carencias de Sergi Roberto como central y Melero le madrugó el centro y clavó el cabezazo. Ponía picante al partido. Y dos minutos después, error de Messi en un pase y Morales recupera, tira una pared y clava un zurdazo en la red de Ter Stegen. El Barcelona había desaparecido del campo. Parecía que quien se jugaba la Liga era el Levante, mientras los de Koeman exhibían una vez más su mandíbula de cristal. Se escapaba la Liga ante un rival que con un poco de orgullo le valía para levantar un cero a dos. Pero el Levante no se jugaba nada y en un atropellado ataque visitante la pelota terminaba llegando a Dembélé, que fusilaba a Aitor. Recuperaba el mando el Barcelona, pero el susto no se lo sacaba nadie a Koeman del cuerpo. El cabreo del holandés con sus jugadores se tradujo en la salida al campo de Mingueza por Pedri. Tocaba taparse las vergüenzas. El Levante no tenía nada que perder, ni mucho que ganar. Así que se soltó el pelo en la segunda parte y cada ataque generaba incertidumbre, si no pánico, en la zaga culé. Messi no compareció en la segunda mitad, ni Busquets, ni Griezmann... Y entonces Koeman quiso guardar la ropa con diez minutos por delante retirando a Griezmann y a Dembélé, el único jugador que asumió protagonismo en el partido. Cambios más que cuestionables. Y tanto conservadurismo obtuvo castigo en el minuto 82 con un resbalón de Dest, que aprovechó Toño para armar una jugada que remató Sergio León. Empate y adiós a la Liga. Justo castigo a un segunda parte catastrófica, a una Liga desastrosa. Adiós a la Liga, adiós a Koeman y quién sabe si adiós a Messi.

En el gol de Dembélé, el Levante pide un pisotón de Griezmann a Miramón. La pelota llega a Dembélé y acaba marcando. El VAR no entiende que sea falta y se da validez al gol del francés.