LaLiga, Real Sociedad-Real Madrid: Zidane busca 9 (0-0)

REAL SOCIEDAD: Remiro; Gorosabel, Aritz, Le Normand, Aihen, Guevara, Merino, Portu, Oyarzabal (Bautista 70'), Barrenetxea (Januzaj 70') e Isak (David Silva 61').

REAL MADRID: Courtois; Carvajal, Varane, Sergio Ramos, Mendy, Modric (Casemiro 69'), Kroos, Odegaard (Valverde 69'), Rodrygo (Marvin 69'), Vinicius (Arribas 89'), Benzema.

ÁRBITRO: Martínez Munuera. Amonestó a Barrenetxea, Mendy, Ahien y Carvajal.

COURTOIS. Salvó a los suyos al final de la primera parte con una partido que marcó el desenlace del choque. Una parada que valió un punto porque su equipo no tiene arriba nada que saue brillo a sus intervenciones atrás.

BENZEMA. No puede asociarse, crear, generar el espacio y concretar el gol. El francés es de lejos el mejor jugador del equipo y el único atacante fiable de cara a puerta de los madridistas. Vinicius no tiene gol y Hazard no tiene ganas.

ISAK. Falló la jugada del partido. Si hace un año en el Bernabéu la rompió, esta vez no pudo brillar y desperdició la ocasión más clara. Courtois le acertó y tapó el remate. Después tuvo otra, pero su rosca se marchó fuera.

Si los onces son síntomas de lo que se avecina, este Real Sociedad-Real Madrid anunciaba un choque de dos pesos pesados que salían a buscar el KO. La Real con mucha juventud y gente muy afilada de mediocampo hacia arriba, y el Real Madrid con un equipo sin ancla que dejaba a Casemiro en el banquillo y asociaba en el once a Odegaard con Rodrygo, Vinicius, Bensema, Modric o Kroos. Y no defarudó el partido, salvo por la falta de goles. Los de Zidane se hicieron con el balón y fueron metiendo a la Real en su área. Sin Casemiro el Madrid monopolizaba la posesión y buscaba entrar por banda con un Vinicius más activo que Rodrygo. A la media hora, un disparo lejano y algunas diagonales de Vinicius eran lo más destacado. El Real Madrid maduraba el partido. Pudo marcar Benzeman tras un grosero error de Remiro en la salida, pero el francés no tenía ajustado el punto de mira en el primer partido de Liga. La Real corría y corría detrás del balón con Portu más vertical que Barrenetxea. Pero no había nioticias de Isak y Oyarzabal. Languidecía la primera parte cuando se estiró la Real y se encontró con la ocasión más clara del partido. Isak solo ante Courtois, que sacaba la pierna abajo para evitar el gol local. Dominio blanco, ocasión blanquiazul. Courtois salvaba al Real Madrid de siempre, el campeón de Liga hace poco más de un mes. Un campeón sin 9.

La segunda comenzó con una jugada en la que Barrenetxea pudo marcar pero quiso ponerla al centro y desperdició una jugada clarísima. El Real Madrid volvía a sufrir defendiendo y amaneció dormido. Y la Real, eléctrica, no necesitaba nada para crear peligro con su verticalidad. Los de Zidane lo fiaban todo a la sociedad Benzema-Vinicius, que generaban peligro pero estaban muy solos arriba. Desde que Cristiano se fue, este Real Madrid está huérfano en el área. Benzema es un jugador excelso, pero no puede crear y rematar las jugadas. Y a día de hoy Rodrygo y Vinicius no tienen gol. Eso permitió que la Real fuese equilibrando el duelo con su despliegue físico. Lo vio Zidane y reforzó el mediocampo con Casemiro y Valverde, asomando también Marvin al campo por un inoperante Rodrygo. Movimiento al que siguió otro de Imanol con Bautista y Jaunzaj en el césped. El empate seguía en el alambre y se mascaba algún gol, solo restaba saber de qué lado. El mensaje de Zidane era claro para Florentino: Mayoral, Jovic y Mariano no le valen. Tiene cuatro delanteros y solo confía en Benzema. Y sin 9, porque Benzema es un 9 y medio, no hay goles. A Zidane le falta un 9 y a la Real, experiencia. Lo último llegará, lo primero, veremos.

El Real Madrid pidió un penalti por un disparo de Ramos que tropezó en el cuerpo de Aihen y luego le dio en el brazo. Pero descartaron en la sala la pena máxima. Tampoco en otro jugada en la que Mendy centró y se llevó luego la tarascada de Gorosabel.