Las claves del tercer título consecutivo de un Atlético (casi) invencible

El mercado de fichajes se presentaba turbio para el club rojiblanco, que vio reclinadas las ofertas de renovación de jugadoras importantísimas como Sonia Bermúdez (entre las máximas goleadoras del torneo los últimos años), Marta Corredera y Andrea Pereira. Esta última baja dolía más si cabe porque reforzó al máximo rival, un Barcelona que ya disfrutaba a Mapi León desde el año anterior y que formaba una pareja de centrales que se conocía de memoria.

Para colmo, Ángel Villacampa, el gran artífice del éxito, también decía adiós. La fuga de talentos era evidente, por lo que tocaba ser concisos en los fichajes. Y lo fueron. Tounkara y Linari mejoraron la defensa, Olga García y Chidiac aumentaron las alternativas en ataque, José Luis Sánchez Vera mejoró a su predecesor en el banquillo y Dolores Silva se convirtió en un revulsivo recurrente.

Pero la incorporación más sonada fue, sin duda, la de Jennifer Hermoso. Inesperada porque la delantera, pese a no disfrutar de los minutos esperados en el PSG, hacía apenas un año que había jugado en un Barça donde era la máxima estrella. Era la única capaz de hacer olvidar los goles y el liderazgo en ataque de Sonia Bermúdez. Y lo hizo con 24 tantos, convirtiéndose en la máxima anotadora por tercera vez en los últimos cuatro años.

Pero la importancia de Hermoso no solo radica en sus goles. La madrileña abarca mucho campo, es inteligente tanto dentro como fuera del área, tiene infinidad de recursos en el arte del remate y hace mejores a sus compañeras. Una crack en toda regla que podría regresar al Barça este mismo verano, según informaciones de la prensa catalana.

Pero si algo ha caracterizado a este Atlético es su condición de (casi) invencible. Las de Sánchez Vera han ganado 26 de los 28 partidos del torneo (solo perdió los dos choques ante el Barça), han marcado 96 goles (una media de 3,2 por partido) y encajó 19 (solo el Barça encajó menos, 15). Números bárbaros.

Si nos detenemos en el apartado ofensivo, el Atlético puede presumir de contar con hasta cinco futbolistas con más de 10 goles: Jenni (24), Esther (13), Olga (12), Ludmila (11) y Ángela Sosa (10). Esta última, además, se erigió como la máxima asistente con 14 pases de gol, siendo clave en las jugadas a balón parado.

Pero el gran fichaje del Atlético fue, sin duda, José Luis Sánchez Vera. La ruptura entre Villacampa y el vestuario dejó tocado a un equipo que necesitaba un cambio. No es fácil mantener la ambición después de dos títulos, y menos si el reto es mayor cada temporada. Pronto se dio cuenta del potencial de jugadoras como Laia Aleixandri o Ángela Sosa, que podían dar mucho más. La primera, desaparecida la campaña pasada, se convirtió en una de las mejores centrales del torneo. La segunda, que ya había dado un paso adelante, dio varios más y podría considerarse perfectamente la MVP de la Liga Iberdrola.

Con Vera, el Atlético ha crecido una barbaridad con y sin balón. Ha hecho del colectivo la mejor arma para dominar los partidos de principio a fin y no dar opciones al rival con presión alta y ritmo intenso prácticamente los 90 minutos. La facilidad para contragolpear con transiciones eléctricas tiene que ver con la mejora en el acierto del pase. Vera ha conseguido que su equipo fabrique goles tanto con 30 toques como con tres.

Esa es la principal razón por la que el Atlético ha sumado 84 puntos de 90 posibles y eliminó en su momento al Manchester City en Champions, alcanzando unos históricos octavos de final. Y aún queda la final de la Copa de la Reina. La mejor noticia para mirar hacia el futuro con optimismo está en el banquillo.