La asistencia a los estadios, asignatura pendiente del fútbol femenino español

La Liga F es, "la Liga de las Campeonas del Mundo". No en vano, es el principal reclamo de la propia competición en sus redes sociales desde su inicio esta temporada, incluso con la huelga que provocó el aplazamiento de la primera jornada. Tiene su sentido: de las 23 futbolistas que se coronaron en Australia y Nueva Zelanda, 19 compiten en clubes españoles (ocho en el Real Madrid, siete en el Barça y una en Levante, Atlético de Madrid, Valencia y Sevilla. La estrella tiene su atractivo y lo saben en la Liga F: las audiencias se dispararon con los partidos de la Selección en el Mundial, por lo que era de esperar que ese éxito se pudiese trasladar a las gradas, tal y como ocurrió en Inglaterra a raíz de la Eurocopa conquistada en el verano de 2022.

Pero no ha sido así. Al menos en este primer tramo de temporada. En las seis jornadas que llevamos, solo un club es capaz de contar con una asistencia media superior a las 4.000 personas. El FC Barcelona juega en otra Liga en ese sentido, con un Johan Cruyff (estadio con un aforo de 6.000 espectadores) que se llena alrededor de un 70% en cada partido (el Levante las Planas llena un 77%, pero en un aforo de 1000). El Real Madrid es el segundo que cuenta con más espectadores en sus partidos en casa, pero la afluencia no llega a la mitad de su aforo (también de 6.000). El tercero es el Sporting de Huelva, si bien con un dato engañoso: su media es de 2.025 aficionados por partido porque abrió el Nuevo Colombino ante el Barça, que atrajo a 5141 personas, la segunda mejor asistencia a un partido de Liga F esta temporada, solo por detrás del Barcelona-Real Sociedad de la cuarta jornada (5.167).

Así pues, de los 48 partidos que se han disputado hasta la fecha en Liga F, en solo 17 se ha sobrepasado la barrera de los 1.000 espectadores por encuentro. Sorprende ver al Levante, tercer clasificado la pasada temporada, como el tercero con peor media de afluencia a sus partidos, solo por delante de los dos clubes sevillanos, con un seguimiento muy por debajo de lo que se espera de entidades de este calibre. "En el Sevilla es habitual ver muy poca gente. Eso no cambia. El club hace poca publicidad del femenino y no llega a explotar el equipo, a pesar de tener buena plantilla. El campo del Sevilla es top (el Jesús Navas cuenta con un aforo de 8.000 personas), pero el equipo no rinde, el club hace poca promoción y en consecuencia, la gente no va", nos explica Alejandro Pecci, periodista de Canal Sur y Futfem. De todos los clubes, el conjunto nervionense es el que cuenta con peor porcentaje de asistencia en relación al aforo, apenas un 4,51%.

La mayoría de los campos están integrados en Ciudades Deportivas, donde el aforo es limitado. Granada y Éibar son los únicos que comparten estadio con el masculino (Los Cármenes, con casi 20.000 de aforo, e Ipurua, con más de 8.000), si bien los nazaríes desperdiciaron la oportunidad de contar con mayor volumen de aficionados precisamente en el choque ante el Real Madrid de la jornada 5, que se disputó en la Ciudad Deportiva y contó con 800 aficionados. El Madrid CFF, por su acuerdo con el Fuenlabrada, juega en el estadio Fernando Torres, con capacidad para 5.400 personas. "Hoy en día voy a algunos campos y pienso 'cómo podemos jugar en este campo'... Está en peligro nuestra integridad como futbolistas. Estamos hablando de una Liga profesional. Cuando cambió el nombre, para mí solo cambió eso. Pero en los actos y los hechos no veo muchas cosas. Aún queda mucho camino por recorrer", declaró recientemente Aitana Bonmatí, flamante Balón de Oro, en Salvados de La Sexta. Al aspecto de las gradas también hay que añadirle el estado del césped, en pésimas condiciones en ocasiones, y muchos de ellos todavía con césped artificial. El Betis ha sido uno de los últimos en cambiar a uno natural.

Si un país pudo sacarle rédito inmediato a una conquista reciente, ese es Inglaterra. Tras la Eurocopa 2022, absoluto éxito en audiencias y gradas, la FA WSL (Premier League inglesa) dio un salto cualitativo en todos los sentidos. El pasado año se abrieron más grandes estadios que en ningún otro, y los registros de asistencia saltaron por los aires. El Arsenal llevó una media de más de 15.000 espectadores a sus partidos, el que más por delante de Manchester United (10.000) y Manchester City (7.000). En la primera jornada de este curso se abrieron Stamford Bridge, Villa Park (con 12.533 personas, récord de asistencia) y el Emirates Stadium, que registró un ambiente espectacular y récord de la competición con 54.115 aficionados en las gradas en el choque ante el Liverpool, club que abrió Anfield dos fechas más tarde para el derby ante el Everton (23.088). El club gunner volvió a jugar en el Emirates en la tercera jornada, llevando a 35.829 personas en su duelo frente al Aston Villa. La media global de la FA WSL es de más de 13.000 personas por partido.

Pero de grandes aperturas no se vive, y en el resto de partidos la asistencia en más comedida, aunque sigue superando con creces la afluencia a los campos españoles. Si solo contamos los partidos en sus sedes habituales, los clubes de la liga inglesa femenina han registrado, hasta la jornada 4, una media de 3.748 aficionados por partido. Es decir, supera a 15 de los 16 equipos de la Liga F. Solo seis de los 24 partidos tuvieron menos de 2.000 aficionados en sus gradas.. "Aún queda mucho camino por recorrer. Tenemos un gran ejemplo, no muy lejos, en Inglaterra. Intentemos mirarlo y aprender de ello", dijo también Aitana Bonmatí en Salvados, mismo discurso que Alexia Putellas el pasado año tras recibir el Balón de Oro: "Mi más sincera enhorabuena a la Federación inglesa por la organización de la Eurocopa y cómo están teniendo impacto con el fútbol femenino en su país. Sin duda son un ejemplo".

La crítica se extiende a la Selección, cuyo récord de asistencia a un partido se alcanzó recientemente en el Nuevo Arcángel de Córdoba ante Suiza: poco más de 14.000 espectadores. "No es una gran cifra, en el Camp Nou hemos movido cifras mucho mayores. Es importante que con la Selección haya cada vez más gente y que estén orgullosas de nosotras", declaró Aitana, consciente de que la Selección inglesa ha sido capaz de llenar Wembley en tres ocasiones, alcanzando los más de 80.000 ante Brasil y más de 70.000 frente a Estados Unidos y Alemania. Recientemente llenó el Stadium of Light de Sunderland (41.947) y el King Power Stadium de Leicester (28.321) ante Escocia y Bélgica respectivamente. El Barça, que ha jugado dos veces en el Camp Nou ante más de 90.000 personas y una en el Metropolitano ante 60.000, es el mayor aliciente para volver a atraer público a los estadios. Por ahora, tiene previsto disputar en Montjuic el Clásico ante el Real Madrid del próximo 19 de noviembre, y el derbi valenciano entre Levante y Valencia se disputará en el Ciutat de Valencia el 12-N. En la pasada jornada se desperdició la oportunidad de abrir San Mamés por el derbi vasco. Mestalla o Anoeta son otros campos que en el pasado han conseguido excelentes cifras. Otros como el Santiago Bernabéu o La Cerámica siguen sin estrenarse para el equipo femenino.

Por ahora, la estrategia de la Liga F se centra en lo audivisual. Gracias a ello se consiguió un contrato por cinco años con DAZN, primera plataforma en la historia de nuestro país que televisa los ocho partidos de cada jornada. En busca de patrocinadores tras el abrupto adiós de Finetwork, el modelo inglés muestra el camino: fomentar la asistencia a los estadios con campañas de marketing y comunicación. Si los clubes no ponen de su parte, es responsabilidad de la competición liderar iniciativas que provoquen un impacto global. Como el que proyectó la propia FA WSL en noviembre de 2019, cuando protagonizaron un fin de semana dedicado a lo grande al fútbol femenino, donde se disputaron partidos en Anfield (Liverpool), Tottenham Stadium (Tottenham) Falmer Stadium (Reading) y Madejski Stadium (Reading), aprovechando un parón internacional en el fútbol masculino. ¿Veremos algo así en España a corto plazo?