Deportes populares
Todos los deportes
Mostrar todo

Opinión, Atlético de Madrid | Los miércoles de Antonio Sanz: Morata, el '9' que vive bajo sospecha

Antonio Sanz

Actualizado 12/07/2022 a las 22:46 GMT+2

Mientras el Atleti presenta nuevo patrocinador para aliviar sus delicadas cuentas, la plantilla comienza el movimiento después de casi cincuenta días de descanso. Un par de caras nuevas, algún crío como meritorio y dos retornos estelares se significan como momentáneas novedades. Destaca Morata, el ‘9’ que vive bajo una sospecha eterna.

Atletico Madrid's Spanish forward Alvaro Morata celebrates after scoring a goal during the Spanish league football match between Deportivo Alaves and Club Atletico de Madrid at the Mendizorroza stadium in Vitoria on October 29, 2019

Fuente de la imagen: Getty Images

Resulta que según diversas informaciones, el delantero centro por el que apuesta como titular Luis Enrique Martínez, seleccionador nacional, para Qatar, renovó por un año más con el Atleti de Simeone cuando salió cedido a Turín. Se ha publicado, no ha sido oficializado por el club, que el contrato se extingue en junio de 2024. La noticia podría encajar dentro de la habilidad rojiblanca por amarrar al jugador a la espera de si se ejercía o no la opción de compra. El mensaje que se deslizaba desde las oficinas era de autoconfianza para la venta. La Juventus debía desembolsar 35 millones de euros, precio que tras la pandemia quedó fuera de mercado para una adquisición que se presumía se iba a acometer. Entretanto, y con los italianos racaneando el precio, nadie mejor aparece con la etiqueta de las tres ‘bes’: bueno, bonito y barato. Entonces, en el ático se determinó que la decisión más acertada era la de apostar sin fisuras por Álvaro Morata, en un curso donde el futbolista se puede revalorizar ya que será un fijo de España en el Mundial. A poco que no se tuerzan las cosas, en invierno obtendrá una mayor venta que en esta estación.
Que Morata no cae bien al seguidor es algo que por mucho que él se esfuerce es una empatía difícil de cambiar. Quizá es influencia de la trayectoria deportiva que ha desarrollado. Decidió montarse en una montaña rusa y eso ha condicionado. De canterano rojiblanco se pasó a delantero de éxito en el eterno rival de la ciudad, mientras salpicaba poco a poco el futuro con cesiones y traspasos millonarios a otros campeonatos. Al ser un apátrida del fútbol, cuando regresó al Atleti de Simeone pocos creyeron la pregonada lealtad al sentimiento atlético, lo que le convirtió en un ser escasamente protegido por la grada, pese al esfuerzo propagandístico que se realizó desde la entidad. Si marcaba goles aumentaba el crédito, pero si fallaba y las sequías se apoderaban del presente decrecía la apuseta por la figura del goleador. La afición lo terminó tratando como al converso que busca, bajo el yugo del mérito semanal, ganarse a la mayoría a golpe de goles. Por eso, el apoyo del técnico se debía convertir en básico para terminar de desterrar la eterna sospecha que acompaña su carrera. Por aquí nacieron las desavenencias con el ‘Cholo’, quien decidió lanzarle arena en momentos determinados que mortificaron el ánimo del ariete.
picture

Álvaro Morata durante su etapa como madridista

Fuente de la imagen: Eurosport

Algo parecido le ocurre cuando se viste con la camiseta roja de España. Al abandonar el Real y declararse atlético de niño, perdió la protección de los seguidores y de los medios afines al club reinante. Tampoco ha percibido el calor de los rojiblancos, que en menor medida se han demostrado poco capaces de apoyar sin fisuras al ‘9’ de Luis Enrique. Así las cosas, Álvaro es un delantero sin patria, sin más valía que su gatillo y sin más poderío que la puntería. En el Metropolitano, algunos han añorado que el entrenador rojiblanco defendiese con el mismo ahínco que el seleccionador el progreso de un atacante de veinte goles por campaña. Porque que nadie olvide que fue el `Cholo’ quien insistió a la propiedad en la contratación del delantero madrileño. Entonces, con Morata en el Chelsea, Simeone entendió que el goleador era capaz de fortalecer el ataque y apretar la competencia con Diego Costa. Sin embargo, la intención del técnico se derrumbó en los primeros movimientos cuando el hispano- brasileño se revolvió y condicionó su titularidad con malos gestos y peor comportamiento. De este modo, se logró terminar con la salida apresurada de uno y en diferido del otro, quien tampoco consiguió ganarse la confianza del entrenador intocable.
picture

Morata y Marcos Alonso, en el Chelsea-Crystal Palace de Premier League 2018/2019

Fuente de la imagen: Getty Images

Llama la atención que el Atleti de Simeone no encuentre hueco al ‘9’ de la Roja. Explicados los condicionantes sociales, las interferencias mediáticas y las soluciones deportivas, el plan de futuro hace mejor al delantero. Las intenciones del jugador se centran en una superación futbolística que le conduzca a un gran campeonato del mundo apoyado en la personalidad y el rendimiento que ofrezca. En el club debe pelear con Cunha, o con Griezmann, o con Joao Félix, o incluso con Correa. La competencia no es menor. Pero, Morata si las cuela, no es inferior en el gol, a los anteriores. Tal vez lo es en el juego, pero precisamente el equipo del ‘Cholo’ no destaca por exaltar una asociación capaz de arruinar el fútbol de cualquier ariete. Sería curioso que el reemplazo en el banquillo del argentino (si algún día se produce) fuera el asturiano. Ah, que nadie olvide que el propietario quiso antes al seleccionador que a quien ahora maneja los designios de la entidad rojiblanca. Tiempo al tiempo.
Únete a Más de 3 millones de usuarios en la app
Mantente al día con las últimas noticias, resultados y deportes en directo
Descargar
Compartir este artículo
Anuncio
Anuncio