La estirpe de los Higuaín

Un artículo en la web oficial de la MLS avisa del emocionante juego que se podrá apreciar en la MLS Cup entre Columbus Crew y Portland Timbers. Entre tanta expectación, los mediapuntas del equipo, Federico Higuaín y Diego Valeri, ambos argentinos, serán los encargados de dar ese toque de imaginación a sus respectivos clubes. Y es que a diferencia de su hermano Gonzalo, el segundo ‘Pipa’ no es encargado de marcar goles sino de darlos.

Federico está triunfando en Estados Unidos, sobre todo en esta temporada, en un proyecto en el que él es uno de los líderes. Antes de que comenzara a las órdenes de Gregg Berhalter en 2013, el mediapunta argentino ya llevaba un año en la ciudad de las oportunidades, tras pasos poco reseñables en Argentina o Turquía. "Creo que tuve fortuna, en su momento estaba jugando en Argentina, tranquilo y se dio esta posibilidad y con mi familia la tomamos con muchas ganas”, dijo para Univisión.

En Ohio ha encontrado un lugar en el que establecerse, no solamente por la comodidad familiar sino deportiva. A sus 31 años, puede desplegar su mejor fútbol, detrás de los delanteros, con toda la libertad, disponiendo una serie de jugadores que permiten potenciar su estilo. Su entrenador sabe las claves de su éxito.

"La cosa con Federico es que es capaz de resolver a una velocidad muy alta aun cuando existe mucha presión. Hace parecer fácil lo que realmente es difícil. Es una cualidad que nos ayuda mucho, porque es capaz de recibir la pelota en cualquier posición, controlarla y hacer la jugada correcta”, aseguró Berhalter.

Para Columbus es un jugador capital, un hombre franquicia que lleva dos temporadas consecutivas (2013 y 2014) siendo nombrado como el MVP del club. Además, la entidad se ha asegurado la permanencia del argentino, que ha firmado la renovación con el club de Ohio y se ha convertido en el mejor pagado por el equipo desde 1994.

Junto a Kamara, uno de los máximos goleadores del campeonato con 22 goles -igual que Giovinco-, son los jugadores a seguir en la final. Su apellido, en definitiva, es sinónimo de éxito.

Aquel defensa argentino que hizo carrera en Argentina y Francia, con el nombre de Jorge Higuaín, dejaría un legado mucho más exitoso en sus hijos. Sin embargo, de sus dos progenitores, el principal protagonismo recae en Gonzalo, delantero del Napoli y una de las referencias de la selección de Argentina.

Ser argentino y jugar en Nápoles tiene un misticismo sin igual desde que Diego Armando Maradona tocó el cielo en San Paolo, ganando dos Scudetti y una Copa de la UEFA. El tifosi napolitano siente una predilección única por todo lo que nace al otro lado del océano y lleva el color albiceleste. Y más aún con el nuevo hito que parece que se está gestando en la ciudad sureña de Italia.

Con la nueva gerencia de Maurizio Sarri, el Napoli tiene un carácter ganador y el delantero argentino define aún más los objetivos. Desde hace 25 años, el equipo partenopeo no lograba ser líder de la Serie A, tras vencer al Inter de Milán, principal rival por el Scudetto. De conseguir el título liguero, sería el tercer trofeo en su etapa italiana, siendo protagonista en la Coppa de Italia (2013/2014) y la Supercoppa de 2014.

No cabe duda de que la estirpe Higuaín está en su máximo esplendor, pudiendo cerrar un año de oro de conseguir la MLS Cup, por parte de Federico, y la Serie A por Gonzalo. Son la familia de moda en el fútbol mundial.