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El periodo de recuperación no será nunca inferior a las 5 o 6 semanas"

Porelperiodigolf

Publicado 27/01/2017 a las 18:54 GMT+1

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Eurosport

Fuente de la imagen: Eurosport

Este tipo de fracturas que ha sufrido Rory McIlroy son las lesiones más comunes del tórax y a menudo son provocadas por golpes o traumatismos en esta zona. En la caja torácica tenemos 24 costillas, aunque sólo catorce de ellas son realmente costillas, porque seis se consideran falsas, y las últimas cuatro, flotantes. Estos elementos protegen nuestros órganos internos, como el corazón o los pulmones, lo cual puede decirnos lo importante que es la caja torácica para el ser humano. Vamos con un esquema.
Cuando se produce una rotura o grieta en la caja torácica, una rotura del cartílago o tejido grueso que une las costillas al esternón se dice que existe una rotura o fractura de costilla, aunque el hueso no se haya roto. Las costillas que más suelen fracturarse son las intermedias ya que las dos primeras están protegidas por las clavículas, y el músculo pectoral mayor y las dos últimas son móviles.
El propio McIlroy comentó en el torneo que el lunes se haría unas pruebas ya que le estaba costando respirar, uno de los síntomas de esa posible rotura o fisura. Además, la fractura generará dolor en la zona y al ejercer presión en el esternón, se detectará con facilidad. Este dolor puede extenderse y producir molestias musculares generales (siempre alrededor de la parte afectada), lo cual provocaría a su vez cansancio y dificultad de movimiento.
En cuanto al tratamiento, hay que decir que la mayoría de las fracturas suelen cerrarse en un período de dos a seis meses, salvo en casos más graves.
En teoría -asegura el doctor José Antonio García Donaire- todo depende del paciente. El periodo de recuperación no será nunca inferior a las cinco o seis semanas, aunque puede alargarse hasta las 12 semanas. Hay que tener en cuenta que el golf de máximo nivel es muy exigente y esta lesión afecta totalmente a la hora de hacer el swing.
Hace algunos años, en 2004, David Beckam, jugador del Real Madrid por aquellos años, sufrió una rotura por estrés en dos de sus costillas y estuvo cerca de dos meses inactivo.
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