Halterofilia

Del 14 al 25 de agosto del 2004

Centro Olímpico de Halterofilia de Nikaia

Hombres: hasta 56 kg, 62 kg, 69 kg, 77 kg, 85 kg, 94 kg, 105 kg y más de 105 kg

Mujeres: hasta 48 kg, 53 kg, 58 kg, 63 kg, 69 kg, 75 kg y más de 75 kg

1896 (hombres), 2000 (mujeres)

Ya en la antigüedad, la halterofilia servía para demostrar la forma física, pero por aquel entonces se usaban sobre todo piedras y objetos similares. En los primeros años de la Edad Moderna solía ser una atracción de circo para presentar a los hombres más fuertes del mundo. Sólo en el siglo XIX la halterofilia fue considerada un deporte. Los primeros clubes se crearon fundamentalmente en Alemania y Austria y en 1877 se disputó la primera competición en Viena. A finales del siglo XIX no había reglas, pero la halterofilia fue disciplina olímpica en los primeros Juegos Olímpicos de la era moderna en 1896. No había categorías (el atleta que levantara más peso era el vencedor). Sólo en 1922, cuando la halterofilia ya tenía 12 años de existencia como deporte olímpico, se establecieron 5 categorías.

Los Campeonatos del Mundo sirven de clasificación para los Juegos Olímpicos de Atenas, pero los halterófilos no obtuvieron su billete directamente, sino que cada país eligió a sus representantes. Habrá 176 hombres y 74 mujeres en la competición de halterofilia.

El halterófilo primero agarra la barra en la plataforma. Cuando la barra alcanza el pecho del levantador, el/ella desciende hacia una posición en cuclillas bajo la barra y se asegura de que sus brazos estén rectos. A partir de ahí, el halterófilo asciende hasta colocarse erecto. En la modalidad de dos tiempos, que se divide en cargada y jerk, se suelen levantar más kilos. Se tienen que hacer dos esfuerzos diferentes. En la cargada, el halterófilo se tiene que colocar la barra de la plataforma a los hombros en un movimiento y permancer erecto. A continuación se ejecuta el jerk, en el que el levantador tiene que ascender la barra desde sus hombros hasta una posición por encima de su cabeza, de nuevo con continuidad. Sus piernas tienen que estar colocadas una delante y otra detrás. En ambos levantamientos la barra se debe sujetar por encima de la cabeza hasta que los jueces indiquen que se puede bajar. Esta señal debe hacerse una vez que el levantador no se mueva. Los halterófilos cuentan con tres intentos para cada levantamiento y sus mejores levantamientos en arrancada y en dos tiempos son los que determinan la clasificación general.