Christian Ahlmann engrandece su leyenda

La glamurosa Saint Tropez ha acogido, por cuarto año consecutivo, el Longines Athina Onassis Horse Show. A lo largo de tres días, una cuarentena de binomios se han visto las caras en uno de los concursos mejor dotados del circuito europeo. El Gran Premio, la cita más esperada del fin de semana, tuvo lugar el sábado por la tarde. De la cuarentena de binomios que pisaron la pista en la primera manga, solo seis pasaron al desempate. Entre los que no tuvieron tanta suerte encontramos a Sergio Álvarez Moya, el único jinete español en la competición. El asturiano y su KWPN de diez años, Charmeur, abandonaron la pista con cuatro puntos y, consecuentemente, con las puertas del desempate cerradas a cal y canto. Fatídico desenlace para el jinete, que el viernes obtenía una destacada segunda posición, en la prueba grande del día, junto al joven y prometedor Iron Man 111.

Christian Ahlmann se impuso en un emocionante desempate a seis. El jinete germano, número cinco del ranking mundial, firmó el cero más rápido del desempate. A lomos de Caribis Z, al que vimos por última vez a finales de abril en Shanghái, el alemán detuvo el cronómetro en 36”43s. A menos de un segundo de distancia terminó el belga Jérome Guery con Garfield de Tiji Des Templiers. Un Alberto Zorzi en alza –hace apenas una semana el joven jinete italiano brillaba en el CSIO 5* de Roma- completó el podio del Gran Premio a lomos de Rackham’Jo, el hijo del célebre Diamant de Semilly, terminando dentro del mismo segundo que el belga.

Peder Fredricsson y H&M Christian K aseguraron el cero. El binomio sueco firmó el último cero del desempate con un tiempo de 39”82s. Tanto Kevin Staut, como Piergiorgio Bucci, no lograron mantener el marcador a cero. A las riendas de sus respectivos Reveur de Hurtebise HDC y Bohemian Rhapsody, ocuparon la quinta y sexta posición de la clasificación respectivamente.