Gran Premio de Italia: Jornada plagada de incidentes que acaba con Pirro en el hospital

Pirro se fue por los suelos de manera inquietante y quedó tendido en el mismo sin sentido en el punto en el que las motos alcanzan la mayor velocidad de todo el trazado italiano, por encima en casi todos los casos de los 350 km/h., una situación que obligó a mostrar bandera roja de inmediato a dirección de carrera para que el piloto pudiese ser asistido por los médicos.

El accidente se produjo al accionar de manera muy brusca el freno delantero de su Ducati cuando rodaba a 355,2 km/h., lo que provocó el bloqueo de la rueda y un movimiento brusco de la moto que lo lanzó por los aires para golpear con contundencia contra el suelo y perder instantáneamente el conocimiento.

La pérdida de conocimiento motivó la activación inmediata del protocolo de seguridad para que el piloto pudiese ser asistido, aunque cuando fue trasladado a la clínica del circuito ya había recuperado el mismo y poco después fue evacuado a un hospital de Florencia tras ser sedado.

El primer parte médico detectó un traumatismo craneal, torácico y lumbar, además de una luxación clavicular que obligó a su traslado a Florencia para descartar lesiones más importantes, según comentó a la salida de la clínica del circuito el director médico de la competición, Ángel Charte.

En esos instantes el mejor tiempo en pista lo ostentaba el italiano Andrea Iannone (Suzuki GSX RR) con 1:47.435, todavía un par de décimas de segundo por encima de su mejor tiempo matinal, y tras ser evacuado Michele Pirro se reanudaron los entrenamientos con una serie de nuevos percances, si bien antes Iannone había conseguido arañar unas décimas a su registro, 1:42.274, más de medio segundo de ventaja respecto a su inmediato perseguidor, el español Jorge Lorenzo (Ducati Desmosedici GP18).

Iannone paró su mejor tiempo en 1:46.735, por delante de los españoles Maverick Viñales (Yamaha YZR M 1) y Marc Márquez (Repsol Honda RC 213 V). Márquez, sexto mejor tiempo por la mañana, comenzó la segunda tanda con cierta intensidad y ya en los primeros minutos tuvo un susto importante al "colarse" en una de las últimas curvas del trazado, lo que le obligó a salirse de la pista y controlar la moto sobre la grava para evitar la caída, lo que hizo con maestría para sin apenas perder tiempo regresar a la pista y continuar los entrenamientos.

Más tarde, apenas unos minutos después de que se anunciase un nuevo récord de velocidad de MotoGP en la larguísima recta del circuito del Mugello, con una velocidad máxima de la moto de Andrea Dovizioso (Ducati Desmosedici GP18) de 356,4 km/h., se produjo en ese mismo punto el accidente del también italiano Michele Pirro (Ducati Desmosedici GP18).

Pirro se fue por los suelos de manera espectacular y quedó tendido en el mismo sin sentido en el punto en el que las motos alcanzan la mayor velocidad de todo el trazado italiano, por encima en casi todos los casos de los 350 km/h., una situación que obligó a mostrar bandera roja de inmediato a dirección de carrera para que el piloto pudiese ser asistido por los médicos.