ATP Barcelona 2019, Nadal-Thiem: El doce tendrá que esperar (4-6 y 4-6)

Rafa Nadal. Peleó, se agarró como pudo al partido y mejoró su versión en una segunda manga donde tuvo sus oportunidades de alargar el enfrentamiento. No está a su mejor nivel pero sigue dando muestras de que poco a poco sigue subiendo peldaños de la escalera que le puede llevar a París de la mejor manera posible. Sin embargo, su rival en semifinales en la ciudad condal estaba varios pasos por encima.

Dominic Thiem. Ya sabía lo que era ganar a Nadal en su mejor versión en tierra en Madrid el curso pasado y en Roma hace dos, y ante un Rafa que sigue buscando la manera de recuperar su mejor tenis, el austríaco firmó un partido casi perfecto, solamente importunado en su servicio en el desenlace. Ganó a Federer en Indian Wells y ha conseguido hacer lo propio ante el manacorí en la pista que lleva su nombre. Un jugador que sigue dando pasos para entrar en el top 3 mundial.

Las sensaciones de Nadal antes de semifinales seguían estando por debajo de lo que suele acostumbrar por la ciudad condal, sin embargo, conforme pasaban los partidos, el nivel iba subiendo poco a poco, hasta tal punto, que Rafa mostraba posiblemente su mejor cara desde que regresara de su lesión de rodilla. Pero cuando te encuentras con un rival que ahora mismo está situado entre los jugadores más en forma del circuito, tocado por la varita mágica, se necesitaba rayar la perfección.

Thiem era un coloso al otro lado de la pista, y bajo una coraza en forma de solidez con su servicio, desarbolaba a un Nadal combativo, aguerrido, que con la ayuda del público intentaba por todas las maneras posibles agarrarse a un partido que por desgracia controlaba el ganador en Indian Wells. Tras varios juegos de tanteo, donde Rafa sufría con su saque, hasta contabilizar cuatro dobles faltas en el parcial inicial, el break llegó en favor del austríaco.

El manacorí fallaba más de la cuenta (15 errores no forzados en el primer set), y no era capaz de neutralizar el gran juego desde el fondo de la pista de Thiem, empeñado en ganar nuevamente a Nadal en un partido en tierra batida, por tercera temporada consecutiva. Rafa no conseguía el premio de contar con bolas de rotura a pesar de subir enteros con su derecha y el parcial se encaminaba al lado de su rival (4-6).

El partido subió de intensidad en la segunda manga. Nadal era consciente de que tenía que proponer mucho más para realmente derribar el muro de Thiem, pero a su vez, el austríaco seguía haciendo daño con su profundidad de golpes entrando en una fase que hizo las delicias de los aficionados que abarrotaban la pista central del Real Club de Tenis de Barcelona.

Pero la mejora de Rafa no se tradujo en oportunidades de rotura, y nuevamente cuando más presionaba el español, se encontró con un break en contra. El número cinco del mundo parecía poner la directa hacia la victoria, pero todavía le quedaría sudar y ganarse el pase a la final una vez más.

Nadal disponía de hasta tres bolas de rotura con 4-5 en el marcador del segundo set, pero no aprovechó ninguna de ellas. Thiem no desperdició el regalo y logró su cuarta victoria sobre el español, siendo el tenista que se medirá a Daniil Medvedev en la gran final. El título número doce de Nadal en Barcelona, al igual que en Monte Carlo, también tendrá que esperar.