Lo que hemos aprendido del Rafa Nadal-Fognini

Encuentra la confianza que buscaba: Tras la tempranera e inesperada derrota de Rafa Nadal a manos de Dustin Brown en Wimbledon, el tenista de Manacor necesitaba reafirmar la fe en su juego. El torneo germano, un evento ATP 500 y de tierra batida, se antojaba como el escenario perfecto para poder conseguirlo. Y el tiempo no ha hecho más que corroborarlo. La derecha del tenista balear ha funcionado a las mil maravillas y le ha permitido sentirse dominador desde el fondo de la pista durante todo el torneo.

Vuelven las dinámicas ganadoras: Rafa Nadal es un jugador de sensaciones. Un tenista que basa gran parte de su éxito en la acumulación de victorias y de buenas rachas. Sus cinco triunfos en el ATP de Hamburgo pueden ser el trampolín que impulse al tenista de Manacor para afrontar con más solvencia y decisión los próximos torneos.

Acaba con el gafe de Fognini: El jugador italiano se había convertido en un rival incómodo para Rafa Nadal. En este 2015, el tenista español había caído ante Fabio en las dos ocasiones en las que se había enfrentado. La primera de ellas en el torneo ATP de Río de Janeiro y la segunda en el Conde de Godó. En ambos casos en tierra batida. En la final del torneo ATP de Hamburgo, Rafa Nadal se ha cobrado su revancha.

Regresa la fuerza del resto. Rafa Nadal basa gran parte de su éxito en la capacidad de generar breaks desde el resto. Una situación necesaria para que el jugador de Manacor sea capaz de desarrollar todo su potencial. En el torneo germano, Rafa Nadal se ha mostrado especialmente incisivo desde el resto, desde donde ha sido capaz de enmendar la poca eficacia que ha mostrado desde la línea de saque.

Su saque sigue siendo su talón de Aquiles: Por poner un pero al partido que ha permitido a Rafa Nadal conquistar el ATP de Hamburgo, hay que destacar el pobre bagaje demostrado desde la línea de saque por el jugador de Manacor, que ha llegado a perder el servicio en cinco ocasiones. Un lastre que ha podido paliar, pero que sin duda debe mejorar para poder afrontar nuevos retos ante rivales de mayor entidad.