Masters 1.000 Miami, Bautista-Sinner: El futuro del tenis habla italiano

Los dos tenistas ya se habían visto las caras esta misma temporada en Abu Dhabi, donde Sinner se impuso en un duelo que también se fue a las tres mangas, y demostraron estar en un momento dulce de su tenis. El español con una madurez que le lleva a dominar los momentos clave y el italiano con una paciencia y sangre fría impropias de su edad, que le permitían firmar una gran semana en Miami, metiéndose con total merecimiento en sus primeras semifinales de un Masters 1.000.

Solamente tuvo un momento de nervios el transalpino, en el juego inicial que fue a parar al resto para Bautista. Esto fue lo único que concedió sin luchar en una primera manga que rozaba la hora de duración y en el que el español sudaba y sabía sufrir para llevársela por mínimos detalles. Con 5-5 llegó el segundo break, el que permitía a Roberto adelantarse en el marcador.

El arranque del segundo fue todo el contrario, con un Sinner que se mantenía sólido desde el fondo y con un Bautista que no aprovechaba sus oportunidades de tomar ventaja en el set. Los errores le lastraban y permitían que fuera el italiano el que finalmente confirmara la rotura para alagar una semifinal que superaba las dos horas bajo el sol de Miami, en una Grandstand donde el poco público permitido disfrutaba con cada uno de los puntos de un duelo que contaba con un ritmo vertiginoso (4-6).

Tomó ventaja Bautista en la tercera manga, gracias a un break a favor, pero cuando se vio por detrás en el marcador, Sinner desplegó su mejor tenis de todo el partido. Encadenó tres juegos de manera consecutiva y logró en blanco al resto el que le permitía meterse en la tercera final de su carrera cuando todavía no tiene ni 20 años, la primera de categoría Masters 1.000. Sin duda, Jannik Sinner está demostrando esta semana en Miami que es el futuro del tenis.