El espejo en el que debe mirarse Garbiñe Muguruza, ella misma

PorPablo Sarmiento

Publicado 10/03/2018 a las 20:20 GMT+1

Garbiñe Muguruza no está viviendo su mejor momento dentro del circuito de la WTA tras caer a las primeras de cambio en segunda ronda de Indian Wells, ante la sorprendente Sachia Vickery (6-2, 5-7 y 1-6). Sin embargo, no debe de suponer motivo de alarma para la número tres mundial, que venía de ser finalista en Doha y semifinalista en Dubái, a tenor de lo sucedido en 2017.

Garbiñe Muguruza

Fuente de la imagen: Getty Images

Es cierto que se esperaba más de la caraqueña en el arranque de 2018, pero no ha refrendado las expectativas puestas en toda una ganadora de dos Grand Slams, el último en Wimbledon el curso pasado. Pero analizando lo sucedido antes de su gran triunfo en el verde del All England Club, fue la primera final del curso para Garbiñe, que sin embargo, en este inicio de año, ya ha conseguido luchar por el título en Doha.

La irregularidad en el juego de la española ha sido una constante en la carrera de Muguruza, que todavía busca la manera de asentar sus nervios y su juego, como consiguiera tras el título en Wimbledon, enlazando un pico de forma que acabó refrendando en Cincinnati, ganando con absoluta autoridad en el inicio de la gira americana que desembarcó en el US Open, alzándose por primer vez en su carrera como número uno mundial.

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Dejando fuera de toda duda el nivel físico de Garbiñe, que destaca en sobremanera dentro del circuito de la WTA, el aspecto mental ha sido el caballo de batalla para la número tres mundial, y la entrada este curso de ‘Conchita’ Martínez en su equipo técnico puede ser el espaldarazo que lleve a una mayor regularidad a la pupila de Sam Sumyk.

Tras sufrir algunos problemas físicos en Brisbane y Sidney antes del Open de Australia, en los últimos torneos, la española está sufriendo psicológicamente en los momentos clave de sus derrotas. Es curioso ver, que tanto en la final de Doha, como en Dubái e Indian Wells, Muguruza ganó el primer set, y contra Vickery, incluso llegó a contar con un 3-0 a favor en el segundo para dar carpetazo al partido, pero siempre la respuesta de sus rivales, acabó por desconectar de la pista a Garbiñe.

Queda mucho por jugar en 2018, con pistas donde Muguruza ha salido victoriosa, como la Philippe Chatrier de Roland Garros o la pista central del All England Club, por lo que la mejor cara de la española está por llegar, a pesar del varapalo sufrido en su primer partido en Estados Unidos del año. La próxima parada, sin tiempo para pensar en las derrotas, Miami, donde la caraqueña tendrá una nueva oportunidad de redención.

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