Masters 1000 Indian Wells, Nadal-Zverev: Remontada sideral 6-7, 6-0 y 7-5

Rafa Nadal: Manteniéndose en la línea ascendente que viene definiendo su tenis en los últimos meses, el jugador de Manacor firmó un partido correcto, pero insuficiente ante un rival que le exigió al máximo. Sin sentirse dominador de fondo de pista, solo la veteranía y la astucia podían salvarle. Y así fue. Un error con bola de partido de su rival encendió la chispa de una remontada sideral. Seis juegos consecutivos para dar la vuelta a un envite que estaba perdido.

Alexander Zverev: No olvidará este partido el tenista germano. El jugador alemán demostró sobre la pista que sin menospreciar las grandes cualidades que atesora tiene una que destaca muy por encima del resto. Esa no es otra que su servicio. Un auténtico trueno que es capaz de ejecutar en cualquier situación. Además, tiene un desparpajo insultante, una derecha poderosa y altísimo ritmo de juego. Pero el tenis hoy le dio una lección. Hay rivales ante los que no se puede dudar.

Un pequeño incidente con la spidercam de la pista central del Masters 1000 de Indian Wells marcó el arranque del partido. Una situación que no pareció afectar en absoluto al joven jugador alemán de tan solo 18 años. Lejos de arrugarse, Alexander Zverev llevó la primera manga al tie break, donde levantó hasta dos bolas de set para acabar apuntándose la primera manga y sorprendiendo a Rafa Nadal.

Todo cambió en la segunda manga. En 26 minutos, el tenista español despachó a su rival para igualar el partido en un set en el que le salió todo bien. Un 81 % con su primer saque, un 77% con el segundo y tres bolas de break convertidas que le permitieron firmar un contundente 6-0. Contundente y engañoso, porque su rival eligió guardar toda su artillería para una tercera y definitiva manga.

Allí se impusieron los tentetiesos de Alexander Zverev. No solo siguió fulminando a Rafa Nadal desde la línea de saque, además consiguió desarmar su juego de fondo de pista siendo agresivo y valiente para imponerse con cierta autoridad y dejar su sello sobre la pista. Y entonces no supo cerrar el partido con 3-5 a favor... Una sencilla volea con bola de partido se quedó en la red y paralizó al tenista germano para cambiarlo todo y dar la victoria al jugador balear.

NUESTRA OPINIÓN: Hace tiempo que Rafa Nadal no salía tan reforzado de un partido. No tanto por el juego desplegado sobre la pista como por las sensaciones positivas que puede sacar del envite. Una remontada inesperada y algo fortuíta que debe desperatar esos mecanismos ganadores que necesita el jugador balear para sacar lo mejor de sí mismo.