Players' Voice | Iga Swiatek: "No podía permitirme creer que había ganado un Grand Slam"

Cuando gané en París, tuve una sensación totalmente abrumadora que también se quedó conmigo durante las primeras semanas después. ¡En realidad, no podía permitirme creer que había ganado un Grand Slam! Definitivamente necesitaba algo de tiempo para mirar todo desde la distancia y descansar porque todo estaba bastante agitado después de la final y cuando regresé a Polonia. De repente comencé a ser muy popular, lo cual fue realmente especial, pero también una situación salvaje.

No hay grandes momentos como ese a menudo en Polonia: estaba Agnieszka Radwańska (exnúmero 2 del mundo de la WTA) y recuerdo haber leído sobre sus logros y verla en YouTube, pero yo era bastante joven en ese momento. Fue una experiencia completamente nueva para mí con la que tuve que aprender a lidiar por mi cuenta, pero creo que manejé las cosas bastante bien.

Al principio, me resultó bastante difícil volver a concentrarme en mi entrenamiento, pero afortunadamente Roland-Garros fue mi último torneo de la temporada, lo que significó que tuve casi cuatro meses de adaptación y preparación. La primera vez que comencé a sentirme "normal" fue en realidad durante la cuarentena en Australia, lo que demuestra que necesitaba mucho tiempo para reajustarme y reasentarme.

Cuando comenzó la temporada 2021, luché un poco con mis propias expectativas porque soy bastante ambicioso y quería jugar todos los partidos como lo hice en París, ¡pero eso es simplemente imposible! Entonces tuve las dos semanas perfectas, pero tenía que ser realista conmigo misma en cuanto a que no voy a estar en la misma forma durante todo el año. Tan pronto como solté algo de esa presión, comencé a desempeñarme cada vez mejor, y durante la semana que gané Adelaide, logré distanciarme de esas expectativas y simplemente disfruté de estar en la cancha, fue entonces cuando pude jugar mi mejor tenis.

Por lo general, cuando siento que la presión me abruma, proviene de mis propios pensamientos y no del exterior. En 2019 comencé a trabajar con una psicóloga (Daria Abramowicz) y ahora viaja conmigo de gira. Hemos estado trabajando mucho en la preparación de Roland-Garros pero, sinceramente, no tengo ni idea de cómo me sentiré cuando vuelva a jugar allí. Una parte de mí siente que tendré más confianza por lo que pasó la última vez, pero no he experimentado antes lo que es defender un título. Estamos tratando de abordarlo como lo haríamos con cualquier otro torneo porque si pongo demasiado énfasis en el hecho de que lo gané la última vez, ¡creo que realmente me estresaría! Todo lo que puedo decir es que me encanta jugar en París y, pase lo que pase, sé que estará bien. Si llegara a cuartos de final, aún lo vería como un gran éxito, incluso si la gente espera más de mí.

A veces es fácil insistir en expectativas como esa, independientemente de si pertenecen a otros o a mí. Algunas semanas, puedo bloquearlos y escapar a mi propia burbuja, como un lugar seguro en mi cabeza, pero a veces simplemente te golpea. Ahí es cuando necesito enviarme pensamientos más amables y recordar que todavía es una situación muy nueva y, en realidad, Roland-Garros fue hace solo siete meses. Creo que se necesita mucho más tiempo y estudiar tu mente y tu actitud para entrar de manera consistente en esa burbuja, pero espero que los resultados que obtuve en Adelaida y Roma demuestren que estoy en el camino correcto.

Durante esos torneos, vi tantos comentarios increíbles en las redes sociales de los fanáticos en casa y realmente pude sentir su apoyo. ¡Significa mucho para mí que mi trabajo haya sido visto y el tenis sea más popular en Polonia ahora mismo!

Después de París y Wimbledon, tendremos los Juegos Olímpicos y no puedo esperar para representar a mi país. Al igual que Roland-Garros, estoy tratando de abordarlo como si fuera un torneo normal, pero es fácil perderse en los pensamientos y obsesionarse con el hecho de que solo se lleva a cabo una vez cada cuatro años y podría ser la única oportunidad de desempeñarse bien. Quiero eliminar cualquier riesgo de llegar allí y sentirme ansiosa, por lo que estoy tratando de mantener la mentalidad de que es el mismo tenis que jugamos cualquier otra semana; tiene lugar en la misma cancha y se aplican las mismas reglas. Creo que es más fácil decirlo que hacerlo, pero creo que es realmente importante.

Mi padre (Tomasz Swiatek) es un exremero olímpico (compitiendo en el evento de cuádruples sculls masculinos en los Juegos Olímpicos de 1988 en Seúl) y me encantaría que fuera conmigo a los Juegos si las restricciones de Covid permiten esa oportunidad. Probablemente sería uno de sus sueños compartir esa experiencia y revivir los Juegos Olímpicos una vez más, ¡aunque esta vez de una manera ligeramente diferente!

Mis padres me han apoyado mucho en todo mi viaje durante toda mi carrera y me encanta pasar tiempo con ellos. Aunque siento que muchas cosas han cambiado desde octubre, sigo siendo la misma persona. En la cancha me siento con más experiencia y confianza, pero en casa las cosas son muy parecidas. Sigo viviendo en la casa de mis padres y después de un verano ajetreado pero muy emocionante por delante, estaré muy emocionada de volver a casa.