US Open 2019, Marin Cilic-Rafa Nadal: El despertar de la bestia (3-6, 6-3, 1-6 y 2-6)

PorSamuel García

Actualizado 03/09/2019 a las 08:27 GMT+2

Rafa Nadal venció a Marin Cilic (3-6, 6-3, 1-6 y 2-6) y ya está en cuartos de final, donde se medirá al argentino Diego Schwartzman. El español, enrabietado tras perder el segundo set, firmó un tercer parcial para el recuerdo que emocionó a toda la Arthur Ashe y que fue clave para desactivar sus primeros problemas en el torneo, donde no había cedido hasta el momento ninguna manga.

Rafael Nadal (US Open 2019)

Fuente de la imagen: Getty Images

Personajes

Marin Cilic: Sólo se encontró consigo mismo durante el segundo set, cuando estuvo muy certero con su primer servicio y tuvo un cañón en su derecha. La reacción de Nadal en el tercer parcial le desactivó por completo, y no es para menos. Hasta el momento, el único jugador que le ha ganado un set al manacorí.

Rafa Nadal: Arrancó el partido con la autoridad mostrada hasta el momento pero todo cambió en el segundo set, cuando estuvo incómodo y desconocido. Desde entonces, ganó 10 de los 11 siguientes juegos y dejó momentos de un tenis antológico, especialmente el juego en el que logró el 3-1 que le situó con break en la tercera manga. Al nivel mostrado en los dos últimos parciales, tiene todos los argumentos para volver a coronarse en Nueva York.

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Nudo

Caía la noche en Nueva York y España rozaba las tres de la madrugada cuando un Rafa Nadal lleno de rabia tras perder el segundo set ante Cilic, firmaba un tercer parcial que bien podría resumir lo que ha sido gran parte de su legendaria carrera.

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El campeón español sacó todo su carácter y lo acompañó de un tenis memorable para borrar de la pista a Marin Cilic, el único jugador que había cuestionado su plácido camino hasta el momento ganándole un set y arrebatándole un par de breaks.

El primer set representó lo que más interesaba a Nadal: mucho control, un Cilic que no encontraba el primer saque y la derecha y algún que otro intercambio que siempre caía del lado del balear. Todo lo contrario sucedió en el segundo, con el croata enchufado, mejorando sustancialmente su servicio y teniendo un martillo en su derecha que le llevó a igualar el partido.

Paradójicamente, Cilic derpertó a la bestia. El inicio de tercer set sirvió para que el número dos del mundo se encontrase con el saque y derecha que tantos réditos le ha dado, y por encima de todo, para que esa buena sintonía con la Arthur Ashe de la que siempre presume el campeón español hiciese aparición a lo grande. Rafa volaba sobre la pista con un público entregado.

El cuarto juego -en el que logró el break- dejó dos puntos colosales y sirvió para emocionar a toda la Arthur Ashe y a los mismísimos Tiger Woods y Sheldon Cooper, espectadores de lujo . La apisonadora había hecho aparición y destrozaba a Cilic hasta el 6-1.

El último set, sin historia porque lo del tercero resultaba difícil de igualar, sirvió para que el 18 veces campeón de Grand Slam afianzase aún más su candidatura a ampliar su leyenda, que no sólo es grande por títulos, si no por partidos como este. Y por si fuera poco, aún le dio tiempo a firmar el para muchos punto del torneo. Rafa es de otra galaxia.