US Open 2020, Djokovic-Dzumhur: Indudable favoritismo (6-1, 6-4 y 6-1)

Novak Djokovic: Arrancó con victoria su Gran Slam más atípico, no sólo por las particularidades que ha traído el coronavirus al tenis, sino también por la sonada ausencia de Nadal y Federer. Únicamente tuvo dificultades en un segundo set marcado por su enfado con el juez de silla que le hizo por momentos irse del partido. Su lado del cuadro hace presagiar una primera semana de poca exigencia.

Damir Dzumhur: Sólo prestó batalla en el segundo parcial, cuando Djokovic se enzarzó con el árbitro. Su nivel, muy alejado del mostrado por un tenista que llegó en su día a estar entre los 30 mejores. El bosnio sigue protagonizando un 2020 muy pobre en cuanto a resultados y tuvo la mala fortuna de enfrentarse al gran favorito en su debut en este US Open 2020.

Sin tiempo para saborear el éxito en Cincinnati, Djokovic debutaba en el US Open 2020 con el cartel de gran favorito y con la aspiración de recortar un Gran Slam en la pelea eterna con Roger Federer y Rafa Nadal.

Que el serbio salvase una bola de break en el primer juego del partido sólo fue un espejismo para un placentero estreno que sólo tuvo sus grises en la segunda manga. En poco más de diez minutos ya dominaba con doble rotura a favor (4-0) ante un rival que por tenis y actitud parecía ya derrotado de antemano. Apenas un juego pudo sumar un Dzumhur sin alternativas en los 24 minutos que duró el primer set conquistado por Djokovic (6-1).

El segundo saque de Dzumhur era un chollo para el número uno del mundo, que en un abrir y cerrar de ojos ya dominaba con break el segundo parcial (2-1). Djokovic castigaba continuamente con las dejadas a su oponente y cuando todo parecía tomar el paso de la placentera primera manga, Nole se enfadó con el silla por una advertencia que recibió tras acercarse a por su toalla y regaló el break, metiendo a su rival en el encuentro.

El partido se enredó en juegos interminables en los que ambos jugadores mantenían a duras penas sus servicios y que dejaban al bosnio con serias opciones de ganar el segundo parcial (3-4). Pero llegado el momento de la verdad, el serbio no perdona. Tres juegos consecutivos para despejar cualquier duda y poner más tierra de por medio (6-4). Lo más sorprendente fue el grito de enfado que lanzó Djokovic a su banquillo justo tras cerrar el sehundo parcial.

No hubo ninguna concesión por parte del jugador de Belgrado en el tercer set (6-1) a la espera de citas de mayor exigencia. El británico Kyle Edmund, que se deshizo de Alexander Bublik, será el siguiente en calibrar el indudable favoritismo de un Djokovic que apunta con fuerza al decimoctavo Grand Slam.