Miami Open 2019: Pliskova evita que Halep asalte el número uno y jugará la final ante Barty

Karolina Pliskova acabó con Simona Halep en las semifinales del Miami Open 2019 (7-5 y 6-1).

La checa y la rumana, dos exnúmeros uno que siguen al acecho del trono, midieron sus fuerzas por novena vez en el circuito (uno en Copa Federación), en un duelo que cayó del lado de Pliskova que supo imponerse en la primera manga para pasar a ser un vendaval en la segunda ante una Halep que pierde la ocasión de asaltar a lo más alto del ranking WTA. De haberse metido en la final la tenista de Constanta hubiera desbancado a Osaka en lo alto de la clasificación.

La australiana Ashleigh Barty, duodécima cabeza de serie del Miami Open, se metió en la final al vencer con doble 6-3 a la estonia Anett Kontaveit, vigésima primera clasificada. Barty, de 22 años, que se enfrentaba por segunda vez a Kontaveit, en la primera perdió en 2014 en la fase de clasificación de Wimbledon, jugará por primera vez la final en Miami ante la checa Karolina Pliskova, quinta favorita. Será el quinto enfrentamiento entre ambas (2-2).

El partido que estuvo varias horas suspendido por la lluvia, se mantuvo bajo control de Barty, a pesar que al inicio de la segunda manga Kontaveit, de 23 años, hizo el 'break' que la puso al frente pero la joven promesa del tenis femenino australiano reaccionó con su mejor resto y peloteo desde el fondo de la pista que hizo la diferencia.

Al final, Barty logró 63 puntos, incluidos 38 con su saque, por 24 de Kontaveit, quien también fue superada en los 'break' con cinco para la tenista australiana por dos para la estonia. Barty, que ya tiene asegurado entrar en la lista de los Top 10 por primera vez en su carrera, también se adaptó mejor a las largas horas de inactividad y de permanencia en el campo por el aplazamiento de la lluvia.

El momento decisivo del partido se dio en el séptimo juego de la segunda manga al romperle el saque a Kontaveit para el parcial de 4-3, luego mantuvo el suyo, y ahí se acabó el espíritu de lucha de la tenista estonia y de su convencimiento que podía darle la vuelta al marcador para forzar un tercer set.