Euroliga, Barcelona-Brose Bamberg: Vence pero no convence (78-74)

78 - Barcelona (19+21+19+19): Rice (18), Oleson (6), Perperoglou (11), Claver (13), Tomic (11) -cinco inicial-, Dorsey (8), Vezenkov (9), Peno (-), Eriksson (-), y Koponen (2),

74 - Brose Bamberg (19+19+19+17): Causeur (19), Strelnieks (7), Heckmann (-), Melli (6), Veremeenko (2) -cinco inicial-, Zisi (4), Staiger (3), Theis (19), Lo (5), Miller (7) y Radosevic (2).

Árbitro: Belosevic (Serbia), Damir (Eslovenia) y Balak (Israel).

Incidencias: partido correspondiente a la cuarta jornada de la Euroliga disputado en el Palau Blaugrana ante 5.074 espectadores. Antes del encuentro los jugadores mostraron una camiseta de apoyo a Pau Ribas, que ante el Estrella Roja de Belgrado padeció una grave lesión en el talón de Aquiles.

NUDO
La cita se antojaba crucial para el Barcelona, después de caer frente al Estrella Roja esta misma semana. Las bajas acuciaban a un vestuario que, sin embargo, recuperó un efectivo con el debut de Petteri Koponen, después de recuperarse de las secuelas de un accidente de tráfico. Comenzó sin ritmo el partido con problemas en la anotación por parte de ambos conjuntos.

Nadie conseguía una diferencia significativa, y el margen entre ambos equipos era mínimo durante los primeros diez minutos de partido. Fabien Causeur destrozaba a los azulgrana con grandes penetraciones y el Barcelona repartía la anotación sin encontrar un estilete ofensivo, que en anteriores fechas había sido Tyrese Rice. Claver asumía en parte esta labor, pero no encontraba la fluidez necesaria el quinteto propuesto por Barztokas.

El segundo cuarto fue un calco del primero. Salvo el amago de los alemanes de poner fin al partido, los guarismos que se manejan eran los de un partido igualado. Rice empezó a tomar la manija del asunto, y Causeur seguía haciendo de las suyas ante la permisividad de la defensa azulgrana. Después de verse cinco puntos abajo en su propia cancha, Barztokas consiguió insuflar algo de vida a su equipo, que acabó llegando al descanso con ventaja (40-38).

La salida tras el paso por vestuarios nos dejó otro Barcelona sobre el parqué. El ritmo aumentó con las acciones de Ante Tomic y Víctor Claver, que dieron las primeras ventajas superiores a los cinco puntos para el Barcelona. No se rompía el choque, pero parecía un buen paso de cara a poder cerrar la victoria en el Palau Blaugrana, ante su afición.

Se llegó a los 10 minutos finales, y los deberes quedaban por hacerse en ambos equipos. Rice generaba todo el peligro desde el perímetro y el Barcelona seguía por delante, pero con la sensación de que el choque podía complicarse en cualquier momento. El conjunto azulgrana lograba la máxima diferencia hasta el momento con ocho puntos, y entraba en la definición del partido con las mejores sensaciones que había podido encontrar tras un día sin ritmo y algo falto de ideas en el ataque.

Theis destrozaba cada vez que lo intentaba la defensa propuesta por Barztokas, y la incertidumbre invadía el pabellón. El Barcelona no mataba a su rival, y lo pagaba en forma de canasta contraria. Al final, la diferencia fue suficiente para ganar el partido, pero no para evitar el sufrimiento final que se vivió en el Palau, cuando el Brose Bamberg se ponía a dos puntos con menos de un minuto para el bocinazo final. Por suerte, no culminó la remontada y el Barcelona pudo celebrar su segundo triunfo en la Euroliga esta temporada (78-74).