La explicación definitiva del manillar roto de Mathieu Van der Poel en Le Samyn

PorEurosport

Publicado 03/03/2021 a las 14:33 GMT+1

Mathieu Van der Poel corrió los últimos kilómetros de Le Samyn con el manillar roto y pese a esta avería mecánica hizo gala de su portentosa habilidad sobre la bicicleta para seguir tirando y trabajar para que su compañero Tim Merlier se alzara con la victoria. El propio ciclista holandés ha revelado realmente qué pasó y cuáles fueron las causas de su percance más famoso hasta la fecha.

Van der Poel da el espectáculo y Tim Merlier remata en Le Samyn

Ya detallamos aquí poco después de la victoria de Tim Merlier en el GP Le Samyn que Mathieu Van der Poel afrontó los últimos kilómetros de carrera con su manillar suelto. Una avería mecánica en un momento crítico que le impidió a él mismo luchar por la victoria y que incluso comprometía su seguridad al rodar a toda velocidad con una parte esencial de su bicicleta rota, concretamente en el agarre y dirección de la misma.

El holandés tiró de genialidad tal y como demostró tirando del pelotón en el último kilómetro y lanzando el esprint para su compañero, todo esto sujetando con una mano la maneta que se había soltado para que no se moviera lateralmente y con agarrando con otra mano el manillar para no perder el control.

Van der Poel confirmó que sufrió esa avería en el último tramo adoquinado y de que no haber tenido ningún percance, él mismo hubiera ido a esprintar por la victoria.

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En esos dos kilómetros finales cuando Van der Poel tiraba con fuerza del grupo perseguidor para neutralizar los últimos ataques antes del esprint, uno de sus rivales del equipo Deceuninck-Quick Step, Florian Senechal, vio en primera persona cómo tomó una curva a toda velocidad con el manillar agarrado desde arriba.

Compartió ese mensaje en su cuenta de Twitter aunque lo borró posteriormente. En ese tuit hacía referencia a que viendo cómo tomó la curva creía que se iba a caer, pero que la habilidad del holandés hizo que no perdiera el control de su bici: “Creía que iba a ser imposible girar, pero no para Mathieu. Respeto”.