Un bombo exigente ante viejos conocidos: Cristiano, Mbappé, Godín, Alcácer, Kepa, ¿Neymar?...

El Real Madrid ha salido bien parado del sorteo de grupos de la Liga de Campeones. Un rival complicado y dos más accesibles componen el escenario de este grupo A para los blancos, que visitarán a un PSG que aún o ha despejado la incógnita sobre si Neymar seguirá en el equipo o se marchará traspasado al Barcelona o al propio Real Madrid. Los de Tuchel se han reforzado discretamente (Diallo, Gueye, Sarabia y Ander Herrera), pero mantienen a Mbappé en sus filas. Un jugador pretendido por Florentino Pérez. Aún así siguen siendo un equipo vulnerable en Liga de Campeones al que le falta cuajo, especialmente en las eliminatorias. Brujas y Galatasaray pasan por ser rivales con cierto pedigrí europeo, pero accesibles. Los turcos se aferran al ambiente infernal de su estadio y al carisma de su entrenador, el legendario Terim, para ordenar un equipo de nómdas en el que aparecen viejos conocidos del fútbol español como N’Zonzi , Babel o Feghouli. No debe dejarse sorprender en su estadio. El Brujas, por su parte, llega deblitado por la marcha de buenos jugadores a la Premier, siendo el jugador más destacado el hombre al que señalan como el nuevo Aubameyang, David Okereke. Un equipo muy físico arriba, pero muy inconsistente tácticamente.

No han tenido suerte los de Simeone. Se vuelven a encontrar en el camino a su horma del zapato. Otro equipo áspero, intenso, enormemente táctico y con una enorme capacidad para crear peligro de la nada. Pero hay un cambio sustancial, se ha marchado Allegri y ha llegado Sarri. El cambio de entrenador debe matizar su fútbol, pero el core futbolístico juventino sigue intacto. Más allá de eso, incluso se ha reforzado con jugadores de mucho nivel como De Ligt, Ramsey, Pellegrini y Rabiot. Sin duda, esta Juventus es una de los favoritas para llevarse la Copa de Europa en la edición que comienza. Lao más positivo es que se conocen de la temporada pasada y es muy difícil que el Cholo tropiece dos veces en la misma piedra. Los alemanes del Bayer Leverkusen pusieron mala cara al enterarse que eran rivales del Atlético. Lógico. el equipo de la aspirina se caracteriza por sus enormes carencias defensivas y por su falta de paciencia con el balón en los pies. Este verano se ha gastado más de 60 millones fichando jugadores que pintan bien como Sinkgraven, Demirbay, Amiri o Diaby. Pero no parece argumento solvente para dar la cara ante un Atlético superior. La mala noticia en el grupo es que el rival accesible, el cuarto, conlleva un desplazamiento largo. Hasta Rusia irán los colchoneros para medirse al Lokomotiv. El equipo cuenta con mucha vieja gloria como Corluka, Höwedes, Krychowiak o Eder, el autor del histórico gol que hizo a Portugal campeón. Un rompecabezas que debe durar poco en las manos del Cholo.

El peor escenario posible. Con eso se encontrará este Barcelona que sigue obsesionado con volver a ganar la Liga de Campeones. Un Borussia Dortmund rearmado hasta los dientes y un Inter con refuerzos muy sonados se cruzan en el camino de los azulgrana, en los que a estas horas su entrenador, Ernesto Valverde, no sabe con quién podrá contar para afrontar el desafío de recuperar el cetro europeo de clubes. El sorteo ha llegado con Bartomeu tratando de convencer a Dembelé para que se marche a París al tiempo que sigue cortejando a Neymar. Y en estas le ha caído al Barça un rival durísimo como el Dortmund. Especialmente este Dortmund 2019-20 que ha añadido a los reconocibles Sancho, Alcácer, Reus o Weigl, una buena versión de Witsel y la llegada de jugadores especialmente notables para seguir proponiendo el fútbol de zafarrancho que lleva años desatando en Europa. A ese vértigo se han sumado este verano Schulz, Thorgan Hazard, Hummels y Brandt. Un equipo incómodo en Alemania y aún más como visitante. El Inter tiene como principal novedad la llegada de Conte, lo que devuelve al equipo al fútbol táctico y cavernario de la era Mourinho. Un frontón con una tripleta de centrales Skriniar, Godín y De Vrij que estará bien rsguardada por mediocentros generosos en el esfuerzo y arriba con un futbolista de referencia como Lukaku a cuya sombra se desplegará Lautaro frotando la lámpara a ver si surge algo. El Slavia pagará los platos rotos. Un bonito viaje a Praga para firmar los tres puntos sin problemas ante un equipo que cuenta en sus filas con un Masopust, ilustre apellido futbolístico, y un delantero llegado de Arabía como apuesta más firme.

Los de Marcelino tampoco han tenido suerte. El Chelsea de Lampard está llamado a ser el favorito en el grupo, pero en realidad es un equipo con más consistencia que fútbol. Con Kanté en la medular apoyado por Kovacic, ha perdido la magia de Hazard y no parece que Pulisic sea un jugador de su talla. Serán Pedro y Giroud las referencias, a las que se sumarán caras nuevas como las de Abraham y Tomori. Kepa y Zouma deberían ser sus bastiones defensivos. Un equipo al que le falta un Lampard futbolista. El Ajax, por su parte, mantiene el ideario y al entenador, Ten Hag. Pero las salidas de De Ligt y De Jong debe pasarles factura. Su descaro y la buena conducción mostrada por su entrenador la pasada temporada les convierte en un rival impredecible dada la calidad técnica de sus futbolistas. Demasiado jóvenes para gobernar partidos que no responden a su escenario de juego de ida y vuelta, pueden sufrir ante el orden y las contras del Valencia. Lisando Martinez y Razvan Marin son los nuevo diamantes que debe pulir Ten Hag. Finalmente el Lille llega muy disminuido por las bajas de Pepé, Rafael Leão, Thiago Mendes y Koné. Salidas que han llenado las arcas del club , pero han vaciado el césped de fútbol. Para tratar de paliar esas salidas han llegado gente como Renato Sanches, Osimhe, Weah, o Bradaric. Lo van a tener complicado para pasar, pero pueden ser los jueces del grupo si logran robar puntos en su casa a los tres rivales que se deben jugar el pase a octavos.