Champions League 2022 | ¿Lo sabías? Dos precedentes entre Atlético y Man City que (casi) nadie recuerda

Atlético de Madrid y Manchester City estrenan en estos cuartos de final de la Champions su historial de enfrentamientos oficiales. Sin embargo, hay otros dos partidos entre ambos prácticamente olvidados dado su caracter amistoso. El primero de ellos en Huelva, en las semifinales del Trofeo Colombino de 1976 y el segundo en Cartagena, durante un parón por partidos de las selecciones en 1995.

La XII edición del tradicional Trofeo Colombino en Huelva tenía como segunda semifinal el enfrentamiento entre el Atlético de Madrid, vigente campeón liguero, y el Manchester City, que venia de ganar la Copa de la Liga inglesa el curso anterior derrotando al Newcastle (2-1) en la final. El duelo congregó una gran asistencia de publico que no quedó satisfecho con el rendimiento de los rojiblancos. Pese al favoritismo y al marcador final (2-0 con goles de Alberto y Rubén Ayala), el equipo de Luis Aragonés no desarrolló el fútbol vistoso que acostumbraba con futbolistas de renombre tales como Leivinha, Pereira, el propio Ratón Ayala o Rubñen Cano.

Este hecho provocó que el público, molesto por la falta de iniciativa colchonera, comenzase a pitar y a animar a los ingleses que, con 1-0 en el marcador, llegaron a igualar la contienda con un gol que, sin embargo, fue anulado por fuera de juego ante las airadas protestas de la grada y del propio conjunto 'citizen', que amenazó con abandonar el terreno de juego. Finalmente, el Atlético caería en la tanda de penaltis de la final contra el Partizan de Belgrado, mientras que el Manchester City superaría, también desde los once metros, al Real Betis en la pugna por el tercer puesto.

El segundo duelo entre ambos se produjo en el año 1995 en Cartagena. Un pequeño parón de 10 días para la disputa de encuentros internacionales llevó a los ingleses a realizar una mini pretemporada en el sur de España y se acordó el amistoso contra un Atlético de Madrid que coqueteaba con el descenso justo una temporada antes de lograr el histórico doblete a las órdenes de Radomir Antic.

Tal y como ha explicado el conjunto inglés en su página web, de boca de su entrenador en aquel momento Brian Horton, "el partido surgió a través de un agente. Habíamos hablado de jugar un amistoso para dar una oportunidad a algunos de nuestros jugadores menos habituales”. El duelo, que finalizó con empate a un gol, quedó marcado por el mal estado del terreno de juego, un hecho sobre el que incluso bromeó uno de los protagonistas aquel día, el exjugador jamaicano Fitzroy Simpson: "Cuando les mostré a mis hijos el resumen en vídeo, dije que no creía que ninguna póliza de seguro permitiese que la generación actual de jugadores saliera a ese campo".

Los goles de Alejandro para los españoles y Griffiths para los ingleses sirvieron para igualar un amistoso en el que un tal Diego Pablo Simeone dirigía la sala de máquinas del conjunto rojiblanco.