En juego uno de los trofeos más valiosos del mundo

Se trata de una preciada copa que jugadores como Ricardo Gomes, Oscar Ruggeri, Enzo Francescoli, Dunga, Cafu, Iván Córdoba, Alex, Juan o Diego Lugano han tenido el honor de levantar en los últimos años.

El trofeo, que ahora alcanza los 99 años de historia, fue confeccionado entre 1916 y 1917 en la Casa Escasany, una joyería de Buenos Aires, por un precio de 3.000 francos suizos, y fue donada a la Confederación Sudamericana de Futbol por el Ministerio Relaciones de Exteriores de Argentina.

La copa alcanza los 77 centímetros de alto, y tiene un diámetro de 30, se fija a una base de madera y su peso supera los nueve kilos. El soporte de madera, estructurado en tres anillos de diferente diámetro colocado uno encima del otro, muestra pequeñas placas de oro que llevan el año y el nombre del equipo ganador con el escudo de armas de su Federación de Fútbol. El diámetro de la parte superior de la copa es de casi 20 centímetros y en la base tiene cerca de 32. En esta parte inferior veremos inscribir este fin de semana el nombre de un nuevo campeón.

El campeón vigente de la competición es Uruguay, que se impuso hace cuatro años en Argentina y que además es el seleccionado nacional que más ediciones del torneo ha ganado con quince triunfos en 43 ediciones, aunque una victoria de Argentina supondría una igualada al frente del palmarés.

Además, también hay trofeo para el segundo clasificado, ya que al subcampeón de la competición se le entrega la Copa Bolivia. Pero todos luchan por el más preciado de los trofeos que se disputan en el continente sudamericano. Chile y Argentina serán esta vez los protagonistas en esa privilegiada lucha.