SheBelieves Cup: Una gira americana con aires de venganza (22:00)

El mal trago que pasó la todopoderosa selección estadounidense el pasado 24 de junio ante la Selección española en Reims no quedó en el olvido. Considerada varios peldaños por debajo de las principales favoritas al título, pocos podían esperar un resultado tan ajustado (2-1) y una victoria tan sufrida (los dos goles fueron de penalti, uno más polémico que otro) en los octavos de final del certamen. La prensa estadounidense, sin ir más lejos, no dudó en elogiar el trabajo realizado por la Roja, más si cabe que en nuestro propio país.

“Su habilidad técnica y su confianza en la posesión agobiaron a las estadounidenses más de lo que estaban acostumbradas”, escribió The Washington Post. “España, un valor creciente en el fútbol femenino, sorprendió a las estadounidenses al generarles más ocasiones de peligro que en los tres partidos anteriores, se pudo leer en New York Times. En Fox, más de lo mismo: "El partido más exigente de Estados Unidos en este Mundial”. Incluso leyendas como Hope Solo vaticinaron un futuro de esplendor para las nuestras: "Qué increíble batalla de España hoy. Con la inversión de su liga nacional, espero que compitan por el título en 2023”.

Aquellas alabanzas no cayeron en saco roto. España, una selección todavía en desarrollo, ya es tomada en cuenta. Tanto, que forma parte de una She Believes Cup donde figuran dos campeones del mundo (Japón y la propia EEUU) e Inglaterra, semifinalista del pasado Mundial y anfitriona de la próxima Eurocopa. Para que nos hagamos una idea: las de Jorge Vilda sustituyen a Brasil, participante en la edición del pasado año, o a potencias como Francia o Alemania, presentes en las dos primeras.

El debut de España fue ante las niponas este jueves (victoria por 3-1), pero el partido marcado en rojo es, por supuesto, el de este domingo. Será la tercera vez que la Roja se enfrente a Estados Unidos y la primera en suelo americano. Los precedentes (amistoso en el Rico Pérez y Mundial de Francia) terminaron en una ajustada derrota española (0-1 y 2-1). ¿A la tercera va la vencida?

Mucho ha cambiado el equipo yankee desde que alzó el título mundial en París. La inevitable despedida de Jill Ellis (102 victorias en 127 partidos) supuso el relevo de un banquillo inalterable en cinco años. Su lugar lo ocupó Vlatko Andonovski, hasta entonces técnico del Seattle Reign de Megan Rapinoe y la española Celia Jiménez. De momento, confía en la vieja guardia a la espera de un relevo generacional que será duro. Eso sí, no podrá contar con una Alex Morgan en la última fase de su embarazo.

Lejos del contexto ideal (la liga estadounidense acabó a finales de octubre y no vuelve hasta abril) pero con el billete asegurado a Tokio 2020 tras triunfar en el preolímpico hace apenas un mes, la selección norteamericana será la gran prueba de fuego de una España que no juega desde el 12 de diciembre pero que cuenta con el grueso de la plantilla más que rodado. Nahikari García es la gran ausencia de una convocatoria donde destacan la leona Ainhoa Vicente y la rayista Sheila García, la enésima futbolista en la que Vilda espera encontrar la profundidad necesaria en un esquema demasiado anquilosado en ocasiones.

Esta She Believes Cup es una oportunidad única de colocarse en el escaparate y escalar en el ránking FIFA. "Tenemos enfrente a tres de las mejores selecciones del mundo. Nuestro objetivo es entrar en el top 10”, dice ambicioso el seleccionador español. Hay que demostrar que lo de Reims no fue un sueño. Que los elogios no debilitan. Que se puede crecer y mucho.