Deportes populares
Todos los deportes
Mostrar todo

ATP CUP, ENTREVISTA EUROSPORT | Dani Gimeno, positivo al llegar a Australia: “Esto es una quiniela”

Fernando Murciego

Actualizado 30/12/2021 a las 13:28 GMT+1

El castellonense, nuevo entrenador de Roberto Bautista esta temporada, dio positivo por COVID en una PCR realizada nada más aterrizar en Australia. Se encuentra perfectamente, asintomático, pero no podrá ejercer como capitán español en la ATP Cup que arranca en la madrugada de Año Nuevo.

Daniel Gimeno Traver

Fuente de la imagen: Getty Images

En apenas unos días, la agenda de Daniel Gimeno Traver (Valencia, 1985) se ha llenado de noticias, aunque no todos buenas. El tenista de Nules, después de dos años trabajando con Pedro Martínez, anunciaba hace unos días que en 2022 trabajará junto a Tomàs Carbonell guiando los pasos de Roberto Bautista. Al mismo tiempo, eso le daba el privilegio de ser el capitán español en la ATP Cup. Un sueño que no podrá cumplir después de haber dado positivo en coronavirus en la primera PCR realizada tras llegar a Australia.
El caso tiene miga, ya que Dani sacrificó sus Navidades en familia por hacer auto-confinamiento en casa con su mujer, para no tomar riesgos de cara al viaje que tenía el día 27 junto al resto del equipo español. Incluso se hizo un test de antígenos antes de tomar el vuelo, el cual dio negativo. Pero todo cambió al aterrizar en Australia y no superar la primera PCR. El entrenador de 36 años se encuentra ahora mismo asintomático en su habitación, momento para atender a Eurosport y explicar todo lo vivido.
Pregunta: Vaya palo, Dani.
Respuesta: Pues sí, la verdad, una putada. No he tenido Navidades ni con mi familia precisamente para evitar esto, pero esto es como jugar a la quiniela, a alguno le toca. Sabíamos que es muy contagioso, que por más precauciones que tomes se ve que es muy fácil cogerlo. No queda otra que tener paciencia y esperar, por suerte estoy asintomático, como si no tuviera nada.
P: ¿Y ahora qué?
R: Ahora solo puedo esperar el negativo, pero tienen que pasar unos días para que me vuelvan a hacer otra prueba, de momento llevo dos días de cuarentena. Intentaré ayudar en lo que pueda al equipo desde la habitación.
P: Ibas a ser el capitán de España en la ATP Cup…
R: Y me hacía muchísima ilusión ser capitán, eran los primeros torneos con Rober (Bautista) y estábamos con muchas ganas de hacerlo bien. Esto lo ha trastocado todo, serán unos 7-10 días encerrados y ya está, habrá tiempo de disfrutar.
P: De jugador a entrenador, ¿cambia mucho la vida?
R: Cambias bastante, sí. Estos dos años me he repartido las semanas con Sergio (Gallego) y eso, de entrada, ya te divide a la mitad la carga de trabajo, además de permitirte estar más tiempo en casa. En ese aspecto cambia mucho, antes era casi imposible planificar una escapada de cuatro días. Ahora tengo más libertad.
P: ¿Hay que estudiar para ser entrenador?
R: En mi caso, desde que acordamos empezar a llevar a Pedro (Martínez), sí que me puse a estudiar a fondo el caso del jugador: qué necesita, qué le puede ir bien, ese tipo de cosas. El saque era un aspecto donde le veíamos mucho margen de mejora, así que estudiamos muchos vídeos de técnicas y mecánicas de servicio, nos empapamos de nueva información. Cuando eres jugador tú tienes tu saque y no te preocupas de nada más; como entrenador hay que ser más versátil, salir de tu cuerpo de tenista y aprender a adaptarte a cada jugador, ser flexible.
P: Veo que en 2021 todavía jugaste dos partidos. ¿Estás retirado o no?
R: ¡Y tanto! (risas) Lo que pasa es que siempre me acaban liando para apuntarme a algún torneo, por el motivo que sea, y eso que ya no entreno, que no tengo ni las raquetas a punto. Luego me meto en pista y cuando llevo un set, pienso: ¿Qué hago yo aquí? Pero bueno, todavía me queda esa pequeña chispa para pegarme una ‘sudadita’ de vez en cuando.
P: ¿En qué momento sentiste que había llegado al final?
R: Hay un antes y un después en la lesión de codo que tuve en 2017. Luego me opero, intento volver, llego a estar 150º… pero mi saque ya no es el mismo. A día de hoy es imposible jugar sin saque, sobre todo con mi estilo de juego. Después llegó otro problema en la rodilla, empecé a jugar con antiinflamatorios, todo se puso cuesta arriba…
P: Ya no era divertido.
R: Básicamente, me di cuenta que ya no tenía esos nervios previos al partido, ves que ya no te duele tanto perder. Ahí todo se tambalea, te hace pensar, se apaga el gen competitivo que te empujaba a seguir trabajando cada día para ser mejor. Quizá yo me lo tomo todo de manera positiva, pero justo de esa situación nació una charla informal con Pedro en el vestuario. Él estaba sin entrenador, iba un poco perdido, así que le dije, medio en broma: ‘Si quieres te puedo hacer alguna semana el año que viene’. Al final se dio todo, pero en mi cabeza ya empezaba a tener claro que mi carrera había llegado al final.
P: ¿Estás satisfecho con tu carrera?
R: Sí, pienso que di todo lo que tenía, me he cuidado, me he entregado a este deporte. ¿Si tenía tenis para haber dado más? Pues seguramente, pero no todo es el tenis, también está la cabeza, son muchos factores. El tenis engloba todo, es un deporte muy justo donde cada uno llega al lugar que se merece. Cuánta gente soñaría con haber hecho mi carrera, lo que pasa es que en España estamos muy mal acostumbrados, si no eres top10 o ganas una Copa Davis no te conocen más allá de tu club. Me hubiera gustado ganar un título, entre otras muchas cosas. Siempre tuve esa ambición de mejorar, de ir para arriba, pero es imposible cumplir todos tus deseos.
P: ¿A qué sabe el éxito como entrenador?
R: Me realiza mucho la sensación de aportar a alguien, sentir que ayudo a otra persona a ser mejor, eso me llena mucho. Aunque sea en un porcentaje muy pequeño, si veo que le hago crecer ya me causa satisfacción. Obviamente, a la hora de jugar el partido, el mando de la Play ya no está en mis manos, ahora lo tiene el jugador, aunque las victorias/derrotas se sufren igual. Encima estás ahí parado, agarrotado, sin liberar tensión por ningún sitio, a veces es incluso más sufrido. El gusanillo de la competición es lo que siempre se lleva dentro y, desde luego, entrenar me ayuda a controlarlo.
P: ¿Cómo valoras estos dos años con Pedro Martínez?
R: Han sido dos años muy positivos, los datos están ahí. Cuando empezamos a trabajar con Pedro estaba 180º y ahora está 60º del mundo. Recuerdo empezar en 2020 y a los tres meses estar ya 107º, hasta que nos paró la pandemia. Han sido dos años muy positivos para los tres, Sergio y yo sabíamos que tenía potencial para estar mucho más arriba, solo hacía falta dar con la tecla. Luego descubrimos que era un jugador que no se arrugaba en los torneos grandes, le gusta jugar por arriba, se crece en esos partidos. Se adapta a todas las superficies y es muy competitivo, así que espero que no haya tocado su techo.
P: Dejas a Pedro y te vas con Bautista. ¿No te da la sensación de abandonar el proyecto en el mejor momento?
R: Es una manera de verlo, pero yo me voy muy satisfecho con el trabajo que hemos hecho. Es un chico con el que ya tenía amistad antes y con el que la voy a mantener después. No sé en qué porcentaje, pero me voy con la sensación de saber que le hemos ayudado a explotar más su potencial. Ojalá siga con esa proyección y se meta top30 o top20, me alegraré muchísimo por él. En mi caso, tomé una decisión y espero acertar.
P: Te vas con un top20, el segundo mejor español del ranking. ¿Era una oferta de esas que no se pueden rechazar?
R: Así lo sentí yo. Aparte, con Roberto tengo mucha amistad, somos los dos de Castellón y nos conocemos desde hace 25 años. Hay muchos vínculos que te ayudan a tomar esa decisión.
P: Proyecto totalmente opuesto al anterior. ¿Qué te toca cambiar?
R: Al no jugar igual, no entrenan igual. Hay unos aspectos donde confluyen todos los jugadores, lo que les hace esta en forma y entrenados, pero luego cada uno es un perfil distinto. El entrenador tiene que adaptarse al jugador que lleva, así que tocará cambiar bastante cosas.
P: No ha sido un 2021 fácil para Roberto, llegas en un momento de mucha responsabilidad.
R: Con Pedro también sentía esa responsabilidad. Para mí, cogerlo 180º y no meterlo top100 hubiera sido un fracaso, sobre todo en un chaval con tanto potencial. Con Roberto siento lo mismo, quiero ser capaz de ayudarle a mantenerse arriba, a volver a estar más arriba. Físicamente le veo al 100%, ni mucho menos está en un momento de declive.
P: ¿Te ha sorprendido algo de los primeros entrenamientos?
R: La verdad es que sí. Por su edad, me esperaba a un jugador con las ideas muy consolidadas, con un estilo muy definido y cerrado a ciertos cambios. Pues todo lo contrario: cada cosa que le planteo, que pienso que le puede ayudar, él está totalmente abierto a probarlo y a seguir mejorando. Son pequeños detalles, pero igual otro jugador de esa veteranía enseguida te corta las alas y te cierra la puerta.
P: Si te pones a jugar en serio, ¿le haces partido?
R: Imposible, igual en un cuadrito le doy guerra (risas). Parado todavía le aguanto, pero si hay que empezar a correr… ahí la pista se me hace gigante. Por suerte o por desgracia, el tenis es muy justo: si no entrenas, no estás al nivel. Sería un milagro si después de dos años sin competir pudiera jugar unos puntos con él.
P: Dani, que tengas una pronta recuperación. Dentro de una semana serás el menos contagioso del lugar.
R: ¡Eso espero! Con este virus nunca se sabe, igual lo puedes volver a coger otra vez al día siguiente. Hay que seguir con la máxima precaución, no te puedes relajar, mucho menos antes de un torneo como el Open de Australia. Aunque lo esté pasando y, sabiendo que cuando salga lo tendré reciente, habrá que cuidarse igual.
Únete a Más de 3 millones de usuarios en la app
Mantente al día con las últimas noticias, resultados y deportes en directo
Descargar
Temas relacionados
Compartir este artículo
Anuncio
Anuncio