Lo que hemos aprendido del Dinamarca-España

Con el regreso de Rafa Nadal a la Copa Davis España ha recuperado la senda de la victoria. Es cierto que el rival, Dinamarca, era un enemigo menor, pero sin duda este triunfo es algo más que una victoria. Es la confirmación de que el gran líder de la Selección vuelve a encabezar un equipo que por ranking y jugadores debe estar entre los favoritos de la competición.

Pese a la inesperada derrota en su debut ante Rusia, Conchita Martínez ha reafirmado sus galones al contar con el apoyo de las primeras espadas del tenis español en este segundo envite del equipo con la extenista argonesa como capitana. La victoria y el buen clima que ha mostrado todo el equipo a lo largo de la concentración confirman que la capitana del conjunto español ha sido la mejor elección para el futuro de España en la Copa Davis, tras los problemas que vivió la Selección en los últimos tiempos.

Los problemas físicos que ha sufrido el jugador de Jávea parecen totalmente olvidados. Su victoria en el partido de individuales del pasado viernes y el buen ritmo de juego mostrado dan a David Ferrer la tranquilidad necesaria para afrontar los nuevos retos que tienen que llegar en estos últimos meses de competición en el 2015. Y a la Selección, la presencia de un jugador que ha sido clave a lo largo del últimos años para los éxitos de España en la Copa Davis.

Rafa Nadal y Fernando Verdasco, que pretenden formar como pareja en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, se mostraron sólidos y correspondieron con creces a la confianza depositada en ellos por Conchita Martínez. Por otro lado, Roberto Bautista, pese a que no pudo saltar a la pista en la eliminatoria ante Dinamarca, formó parte del equipo con el que España ha recuperado la senda de la victoria en la Copa Davis. El tenista de Castellón cuenta con la confianza de la capitana del equipo de Copa Davis, tal y como ella misma afirmó en la previa de la eliminatoria.

NUESTRA OPINIÓN: Pese a que es obvio que el envite de Copa Davis ante la débil Dinamarca era, sobre el papel, un mero trámite para España, las sensaciones con las que abandona el equipo de Conchita Martínez la eliminatoria no pueden ser mejores. Por primera vez en mucho tiempo, todos en la Selección van a una y parecen lo que son. Un gran equipo.